10 plantas de interior que crecen en agua: la guía de las más típicas con sus cuidados, características y curiosidades

El poto es una de las plantas de interior más comunes por su gran resistencia y una de las que mejor aguanta cultivada en agua. Puede durar sin riego hasta 15 días, aunque depende del clima. Es una planta que cuenta con hojas de color verde y pequeños detalles en amarillo. Además, por si no lo sabías se puede cultivar en agua en lugar de tierra, y puede llegar a medir unos 30 cm en un mes.

El bambú de la suerte o Lucky Bamboo, también conocido por su nombre científico dracaena sanderiana, es una planta que puede crecer sin ninguna dificultad en agua. Es una planta muy resistente que atrae, según el Feng Shui, buena suerte a los interiores. Además, es fácil de cuidar, ya que es muy resistente. Necesita pocos cuidados y es aconsejable situar esta planta en una zona muy luminosa.

Lo normal es cultivarla en un recipiente de agua, sin nada de tierra. En el caso de que quieras que crezca fuerte puedes trasplantarla a una maceta con tierra sin problema.

La hiedra es una planta fresca, bonita y que decora cualquier rincón. Además de cultivarse en maceta, también se puede añadir en jarrones con agua. La hiedra es una planta que no necesita mucha luz. Debes evitar añadirla en zonas con alguna fuente de calor para evitar que se seque. 

El espatifilo es una planta que cuenta con flores blancas y hojas verdes. Es una planta con flor muy resistente y llamativa. Se adapta bien a los interiores con poca luz y necesita una temperatura estable, mejor no por debajo de los 15 °C. Soporta bien la humedad, pero no los riegos excesivos. No hace falta hacer un mantenimiento diario. Además, se puede cultivar en agua y purifica el aire. Es ideal para añadirla en el interior de la casa o incluso en la zona de la oficina, junto al ordenador.

La aglaonema es una planta sencilla y común que llama la atención por su gran colorido. No necesita mucha luz y prefiere entornos cálidos. Es una planta tropical de crecimiento lento que purifica el aire. Se puede cultivar perfectamente en jarrones con agua. Eso sí, hay que tener cuidado con esta planta porque su ingesta es tóxica. Así que quizás es mejor no tenerla en el interior si tienes mascotas o niños muy pequeños.

Esta es otra planta decorativa que crece en agua. Se la conoce también como planta china del dinero, de donde procede, así como hiedra sueca o planta del misionero. Sus cuidados son muy sencillos, lo que la hace perfecta para principiantes. Necesita un sustrato humífero, pero también puede crecer en agua siempre y cuando esté situada en un lugar luminoso. Basta con coger uno de sus tallos y meterla en agua, ¡verás qué bien vive!

A la sanseviera también se la conoce como lengua de suegra o cinta. Se caracteriza por su gran resistencia y capacidad para adaptarse a diversas condiciones de crecimiento, incluyendo el cultivo de agua. Tiene hojas largas, rectas y de color verde con patrones de rayas amarillas. Lo mejor para colocarla en el interior es ponerla en una zona donde le llegue luz solar indirecta y no directa, ya que puede dañar las hojas.

Al igual que la Sanseviera, el filodendro es otra planta muy popular para colocarla en el interior de los hogares. Generalmente, se cultiva en tierra, pero se adapta a las condiciones del cultivo de agua en varias ocasiones. Para identificarlo, solo hay que fijarnos en sus hojas, que son grandes y perforadas, muy distintivas. Para no dañar sus hojas, es recomendable no colocarla en una zona donde pueda dar la luz solar directa.