20 plantas perfectas (con y sin flor) para decorar patios y jardines

Una de nuestras plantas favoritas del verano es la buganvilla. La intensidad del color de sus flores rosas o violetas, unido al hecho de que se trata de una planta trepadora que adora el sol, hacen de la buganvilla el complemento perfecto de porches y terrazas. Eso sí, mucho cuidado en invierno, ¡porque no toleran las heladas!

Las hortensias son, probablemente, una de las plantas más agradecidas que existen. Además de ser muy fáciles de cultivar -tanto en maceta como en suelo-, cuando florecen se convierten en un auténtico espectáculo visual. 

Se trata de una planta que necesita vivir en la sombra o en la semisombra, nunca a pleno sol (pero siempre con luz), ya que esto terminaría amarilleando sus preciosas hojas. ¿Las claves para su cuidado? Plantarla en tierra ácida, mantenerla siempre húmeda, y podar los macizos de flores que se hayan marchitado.

Su embriagante aroma es capaz de relajar hasta la mente más estresada, pero las bondades de la lavanda van más allá. Esta planta aromática con flores que oscilan entre el azul y el violeta, es ideal para jardines y patios soleados, ya que se nutre del astro rey. Por si fuera poco, en invierno también resiste como ninguna, y solo necesita que la riegues un par de veces a la semana.

Entre las plantas de exterior para terrazas, patios y jardines, no puede faltar la hiedra. La hiedra es una planta trepadora que solemos encontrar habitando en las fachadas de piedra de las casas de campo adora la luz del sol, pero también crece sin problemas en ambientes sombreados. ¿Sabías que, además de quedar preciosa para decorar las paredes, también absorbe la humedad y potencia el frescor? ¡Tenlo en cuenta durante el verano!

Dentro de los rosales existe todo un mundo de posibilidades, pero si quieres dejar a todos con la boca abierta, elige un rosal trepador para darle vida a tu patio o jardín. Puedes utilizarlo para decorar una pérgola o para cubrir parte de la pared (llegan a alcanzar más de 2 metros de altura). Además, los rosales son plantas que florecen todo el año, lo que significa que tendrás un jardín de ensueño los 365 días. ¿Alguien da más?

Aparte de contar con una amplísima gama de formas y colores, los claveles resisten la luz directa del sol, así que podrás despreocuparte y limitarte a disfrutar de la explosión de alegría (pero no te olvides de regarlos con asiduidad durante el verano).

La reina de las flores silvestres aguanta como una campeona los rayos del sol, y encima, ¡apenas necesita cuidados! Riégala frecuentemente sin caer en el exceso, y utilízala como fondo para tus fotos de Instagram (queda preciosa en ramos con flores de lavanda y hojas de eucalipto atados con un cordelito o dentro de un jarrón artesanal).

Si buscas una planta que resista carros y carretas durante todo el año, que se lleve bien con el sol y que te deleite con sus flores permanentemente, elige un geranio. Los tienes en un sinfín de colores, y son estupendos si no tienes mucha mano con la jardinería. Lo único que debes hacer es mantenerlos siempre húmedos en los meses de más calor, y podarlos cuando llegue el otoño.

Al igual que las buganvillas, las glicinas también son plantas trepadoras que habitualmente encontramos decorando porches y túneles florales en jardines. No es de extrañar, ya que la belleza de sus pétalos de color malva y sus racimos colgantes, unido a su aroma cautivador, envuelven de magia aquellos espacios donde residen.

Crece mejor en ambientes soleados, pero también resiste cuando llegan las heladas. En cuanto al riego, es importante mantenerla hidrata durante el verano, y no dejar nunca que la tierra se seque por completo.

Las influencers de Instagram los pusieron de moda, pero los tulipanes llevan conquistando los jardines desde tiempos inmemoriales. Esta planta con flores de colores vivos como el amarillo o el rojo resiste el sol directo y la semisombra, requiere de suelos drenados y arenosos, y debe mantenerse siempre húmeda. ¿Quieres plantar tulipanes en casa? Te lo explicamos paso a paso. 

¿Por qué no te animas con un árbol? Los limoneros quedan de cine en patios y jardines soleados, y como sus raíces están limitadas al tamaño de las macetas, nunca crecerán demasiado. Además, ¡apenas requieren mantenimiento! Aprende a plantar un limonero paso a paso.

Las camelias son arbustos de hoja perenne con una floración espectacular en invierno y principios de primavera. Prefieren suelos ácidos y húmedos, con sombra parcial y protegidas del viento. Son ideales para dar un toque elegante a patios y jardines, colocándolas en grandes macetas de cerámica o en parterres junto a otros arbustos de flor.

Sus simpáticas flores con forma de trompeta son fans de la luz directa del sol, toleran el calor y no te pedirán mucha agua. Eso sí, el drenaje de la tierra es imprescindible para que las petunias crezcan bien. Descubre más cuidados de las petunias. 

¡No todo iban a ser flores de colores! Los helechos, aparte de ser superfáciles de mantener y muy resistentes, son el complemento ideal de cualquier jardín. Para que crezcan sanos, debes situarlos en zonas con semisombra, sin sol directo. También adoran la humedad (sin riegos excesivos, ya que estos podrían pudrir sus raíces).

Las dalias son plantas bulbosas que florecen en verano y otoño, ofreciendo una explosión de color en tonos vibrantes como rojo, rosa, amarillo o morado. Necesitan un suelo bien drenado, exposición al sol y riegos regulares sin encharcar. Son perfectas para borduras en jardines, macizos de flores o incluso en macetas grandes para decorar terrazas con un estilo romántico y lleno de vida.
 

Con sus preciosas flores de color blanco, el jazmín es una de las plantas más deseadas en la decoración de terrazas y jardines. Las hay trepadoras, pero también se pueden cultivar en macetas, aunque todas requieren de exposición directa al sol.

En los meses de más calor tendrás que regarla cada dos días o tres, pero cuando llegue el frío, solo deberás hacerlo cuando la tierra se seque.