"Ni un día te van a durar". ¿Cuántas veces hemos escuchado esta frase cuando hemos integrado muebles o espacios de color blanco en nuestra casa? A pesar de que este tono es mucho más delicado que otros porque la suciedad puede verse mucho más, en realidad tiene sus ventajas también, y es posible mantener un blanco puro sin que suponga una gran dificultad.
Esto es algo que hemos aprendido a partir de la influencer y experta en orden y limpieza Esther Leuthold (@ordenenmivida), quien nos ha abierto los ojos (a nosotros y a sus 112 mil seguidores más) para aprender cómo podemos mantener nuestras paredes blancas perfectas y decir adiós a cualquier tipo de mancha o suciedad. Y es que, es cierto que con el gotelé, se disimulaba mucho mejor, pero esta textura en las paredes hace tiempo que pasó a mejor vida.
El truco infalible para limpiar las paredes blancas
Para poner en práctica el truco con el que nuestras paredes quedarán inmaculadas, la experta nos recomienda contar con dos elementos imprescindibles:
- Bayeta de microfibra a estrenar.
- CIF cremoso (se puede utilizar el normal, es decir, el que se utiliza para el resto de superficies de la casa).
Elaboración
- Humedece un poco la bayeta y pon un poco del producto en ella.
- Aplica la bayeta con el producto a la pared (prueba primero en una mancha de un rinconcito o no muy visible por si las moscas)
- Frota suavemente (aunque ejerciendo ligera presión) en círculos, a veces hay que insistir un poco.
- Si la mancha es fuerte, deja sobre ella un poco de la crema usando la propia bayeta y frota suave (como para que "empape").
¡Cuidado! Aunque veas que la parte que has limpiado se ve más reluciente que el resto de la pared, no limpies toda la superficie. Espera unos minutos hasta que se seque y entonces decide.
Otros trucos para limpiar las paredes blancas
Con agua y vinagre de limpieza:
- Mezcla partes iguales de agua y vinagre de limpieza en un balde.
- Humedece un paño suave en la solución y limpia las paredes con movimientos suaves.
- El vinagre blanco es eficaz para eliminar manchas y desinfectar.
Con bicarbonato de sodio y agua:
- Haz una pasta mezclando bicarbonato de sodio con agua.
- Aplica la pasta sobre las manchas o áreas sucias de la pared.
- Frota suavemente con un cepillo o esponja y luego limpia con un paño húmedo.
Con jugo de limón:
- Mezcla jugo de limón con agua en partes iguales.
- Utiliza un paño limpio empapado en la solución para limpiar las manchas en las paredes.
- El limón también ayuda a eliminar olores desagradables.
Con cinta adhesiva para pelusa:
- Enrolla cinta adhesiva para pelusa alrededor de tu mano con el lado pegajoso hacia afuera.
- Presiona la cinta sobre las manchas de polvo o pelusa en las paredes.
- Esto es eficaz para limpiar pequeñas partículas sin dañar la pintura.
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