Cómo limpiar los canalones de tu casa para evitar problemas en los días de lluvia

Los canalones de una vivienda cumplen un papel crucial en la gestión del agua de lluvia, redirigiéndola de manera segura lejos de la estructura del edificio. En apariencia, pueden pasar desapercibidos, pero su función es fundamental para prevenir una serie de problemas que podrían afectar seriamente la integridad de nuestra vivienda.

Uno de los principales objetivos de los canalones es evitar la infiltración de agua en la estructura del edificio. Cuando las lluvias caen con fuerza, el agua puede acumularse en los alrededores de la casa, y si no se canaliza adecuadamente, este exceso de agua puede encontrar su camino hacia los cimientos, las paredes y el techo. Con el tiempo, esto puede provocar daños significativos, como filtraciones en el techo, goteras en el interior, y, en última instancia, problemas de humedades. Estos problemas no solo son incómodos, sino que también pueden resultar costosos de reparar.

¿Cuándo se recomienda limpiar los canalones?

El momento ideal para revisar y llevar a cabo el mantenimiento de los canalones es a finales del otoño, una vez que las hojas de los árboles hayan terminado de caer. También es recomendable limpiar los canalones antes de la temporada de lluvias para que puedan funcionar correctamente.  Durante los días de lluvia intensos, la acumulación de hojas y otros objetos pueden causar la obstrucción del paso del agua, haciendo que se desborde y cause humedades en las paredes, el techo o el suelo. 

¿Cómo limpiar los canalones de forma segura?

Para prevenir estos problemas, resulta fundamental realizar una limpieza anual de los canalones de tu vivienda, preferiblemente antes del inicio de la temporada de lluvias. A continuación, te contamos el procedimiento de cómo limpiar los canalones de una manera segura y efectiva paso a paso: 

Paso 1. Primero, prepara todo lo que vas a necesitar. En primer lugar, necesitas una escalera suficientemente alta y estable para poder acceder al canalón. Asegúrate de colocarla sobre una superficie sólida y uniforme, y contar con la asistencia de otra persona para sujetarla. Además, se aconseja el uso de guantes, gafas y una mascarilla como medida de precaución contra la suciedad y posibles microorganismos.

Canalón con suciedad. 

Paso 2. Una vez que tengas acceso con total seguridad, empieza a retirar las hojas, ramas y suciedad que encuentren en el canalón para tirarlos posteriormente. Es importante evitar dejar ningún objeto en el interior del canalón, ya que esto podría ocasionar obstrucciones que, a su vez, podrían entorpecer el flujo normal del agua. Estas obstrucciones pueden derivar en problemas de drenaje que afectarán negativamente el rendimiento del sistema de canalización, dando lugar a posibles daños en la estructura del techo o la fachada de la vivienda. 

Canalón lleno de hojas. 

Paso 3. Cuando hayas quitado la suciedad más grande, limpia la parte interior y exterior del canalón con ayuda de una manguera. En ese paso, comprueba el canalón, funciona correctamente y no tenga tiene ninguna fuga o bloqueo. Si identificas algún desperfecto, puedes ajustar o reemplazar las piezas que se encuentren dañadas para garantizar un funcionamiento óptimo.

Paso 4. Finalmente, considera la opción de instalar un protector o una rejilla como medida preventiva para evitar futuras acumulaciones de hojas y otros objetos en el canalón. Y para evitar la proliferación de hongos y bacterias que con el paso del tiempo peden dañar el material del canalón, considera la posibilidad de utilizar un agente desinfectante o antimoho. 

Canalón con rejilla.

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