Las 10 razas de gatos más grandes del mundo: todo lo que debes saber con fotos y características

El Maine Coon es la raza de gatos grandes más popular. Originaria del estado de Maine, los ejemplares de esta raza pueden alcanzar los 12 kilos, y su rasgo más característico, además de su cola, es su pelo largo y sedoso. En cuanto a su carácter, se trata de una raza muy sociable, inteligente y juguetona.

El pelo ondulado es, sin duda, el rasgo más distintivo de la raza de gatos Selkirk Rex. Este felino que también se conoce como gato oveja, procede de Selkirk, Wyoming, y aunque tiene el típico carácter independiente de los gatos, también es muy dulce, activo, juguetón y silencioso.

Otra raza de gatos grandes que destaca por su elegancia y majestuosidad, es el gato siberiano. Como su propio nombre indica, viene de Siberia, y gracias a las tres capas de su manto, puede soportar temperaturas de hasta 30º C bajo cero. Además, es una raza hipoalergénica, y se lleva estupendamente con niños y adultos, de hecho, ¡le encanta la compañía humana!

El gato Highlander tiene un físico de lo más peculiar, con las orejas rizadas y la cola corta. Como cabría esperar, su origen no es natural, sino que se debe a distintos cruces experimentales que tuvieron lugar en la Costa Este en 1993. Fuerte, musculoso y enérgico, este gato también se muestra muy cariñoso con los suyos. Como curiosidad, indicarte que al Highlander le gusta estar en el agua, así que no te sorprendas si te lo encuentras chapotenando en la bañera.

De nuevo, nos encontramos con una raza de gatos grandes con un origen muy reciente, concretamente, 2003. Creada por Carol Drymon con el cruce de un gato de Bengala y un gato Ocicat, el Cheetoh mantiene el aspecto exótico de ambos gatos, con un carácter inteligente, leal, amable, dócil y cariñoso.

El gato Bosque de Noruega es una elegante raza de gatos con el pelo semilargo y el rostro triangular, cuyo origen es tan antiguo que ya era empleada como mascota por los vikingos. Dulce, cariñoso y muy curioso, este felino adora las alturas y disfruta enormemente de los espacios al aire libre.

El Ragdoll es otra raza de gatos grandes con origen en Estados Unidos. Su nombre significa 'muñeca de trapo', y se debe a que el Ragdoll relaja su cuerpo por completo cuando una persona lo coge en brazos o cuando se tumba sobre alguien, por ejemplo en el sofá. Su pelo es muy suave y denso, algo que, junto a su temperamento calmado, lo convierten en una mascota ideal.

La raza Ragamuffin guarda muchas similitudes con el Ragdoll. Todo comenzó cuando Ann Baker, creadora de la raza Ragdoll, se hizo con los derechos del nombre, y años más tarde varios criadores decidieron romper con la criadora y sus condiciones para crear una raza similar a la que llamaron Ragamuffin. Su aspecto es grande y musculoso, con una cola larga y peluda, y un carácter dulce y tranquilo que heredó de su pariente, el Ragdoll.

El gato Scottish Fold es conocido por sus orejas plegadas, un defecto genético que, aunque pueda parecer adorable, realmente le genera muchos problemas de salud. De pelo corto y denso, el carácter de esta raza es dócil, tranquilo y cariñoso, por eso es muy deseada por familias con niños.

Aunque parece un pequeño tigre, el Chausie es un gato que surgió en Egipto hace miles de años. Se caracteriza, evidentemente, por su pelaje atigrado. Un rasgo que contrasta con su carácter apegado y dulce. Y es que al Chausie le encanta estar cerca de sus amos. También es muy curioso, activo y juguetón.