Natalia Zubizarreta, interiorista: "Basta ya de minimalismo, de frialdad y de paredes blancas"

Lograr luz y amplitud en una casa es posible con algunos cambios estratégicos que mejoran la iluminación y dan sensación de espacios más abiertos. “Se puede conseguir a través de materiales claros, espejos con presencia, pinceladas de color en determinados lugares…”.

La interiorista ha hecho especial hincapié en la distribución, la piedra angular sobre la que gira el 75% del éxito de una casa. “Los interioristas os ayudaremos a sacar el mayor rendimiento a vuestro hogar, teniendo en cuenta lo que demanda el propio espacio y vuestros gustos y necesidades”, apunta. En la imagen, Natalia Zubizarreta en La Casa de Navidad.

No nos cansaremos de repetirlo: un buen proyecto de iluminación también es vital para crear casas armoniosas, serenas y con alma. “El tipo de iluminación que debes usar en tu hogar dependerá de varios factores, pero principalmente del uso que le darás a la habitación. A mí, personalmente, la iluminación cálida me parece súper agradable”, explica.

Estamos inmersos en una corriente que aboga por la vuelta a la naturaleza, a los orígenes, a un lugar donde sentirnos a gusto. “Es una mirada que se traslada a la decoración a través de materiales naturales y otros que simulan serlo. De esta manera, se engaña al cerebro para que piense que estamos en la naturaleza y se relaje”, explica Natalia. “La madera es siempre un comodín que nos aporta calidez, y sé de lo que hablo, ¡mis abuelos fundaron en Bilbao la empresa “Maderas Zubizarreta”!”, explica, mientras sonríe al recordarlo.

Sin embargo, nos cuenta que hay otras opciones que, sin ser naturales, son igualmente cálidas y aparentes para recrear un trocito de naturaleza en nuestro hogar. ¿Ejemplos? Hay muchos: porcelánicos y laminados que imitan a la madera, azulejos que parecen piedra natural…

En pequeña escala, no se olvida de los detalles de fibras naturales que tanto nos gustan en la revista El Mueble.“Son nuestros grandes aliados a la hora de decorar. Que nunca falten los cestos, las cajas, una silla bonita de fibras, una alfombra de yute…”.

¿Qué sería de una casa sin textiles? “Nos abrazan, nos dan calidez… ¡sino solo habría eco! Es importante crear una buena base a través de los sofás, las alfombras, las cortinas en primer lugar. Luego pasaremos a elementos más pequeños como las mantitas o los cojines. Vestir tu casa también es un acto de amor hacia ella y hacia nosotros mismos”, asegura.

Volvemos a los guiños a la naturaleza, a las raíces más profundas donde todo tiene un porqué. “Fijaros en Zara Home, que es un indicador de tendencias absoluto. Veréis que se llevan las paredes con textura porque hacen un efecto cueva muy acogedor y nos trasladan a los orígenes. Existen opciones como morteros de arcilla, morteros a la cal… pero hay que aplicarlo con cabeza para que no chirríe”, asegura Natalia.

Libros y flores, dos elementos que no pueden faltar en una casa con vida. “Me gusta ordenar los libros de tal manera que generen armonía visual. Por eso, muchas veces me gusta colocarlos en la estantería con el lomo hacia adentro, de tal manera que se vean solo las hojas para dar sensación de uniformidad”, asegura.

Por otro lado, si eres de esos a los que no le sobrevive ninguna planta, Natalia nos comenta que tanto helechos como esparragueras “aguantan todo” y nos aportan ese necesario toque verde en nuestro hogar. “Además, os animo a comprar flores cada quince días o una vez al mes. Es un placer, un gesto que nos hace felices y aporta ese efecto ‘flash’ en casa”.

Una vez que tenemos la base adecuada, toca llenarla de vida a través de la decoración. “No escatimes en piezas de artesanía que honran el trabajo hecho con las manos, un cuadro que tenga un significado especial para ti, piezas antiguas con alma que dan el punto de personalidad a la casa… Pues, incluso, iluminarlas con un foco para hacerlas protagonistas”, nos cuenta.

Y hablando de iluminación y ambientes calentitos, Natalia es fiel defensora de las velas – "siempre encendidas y derretidas, para que queden más naturales"…- y de las chimeneas, siempre que el espacio lo permita. Entre las nuevas opciones que hay en el mercado, asegura que sus favoritas son las de bioetanol.

Un último y sabio consejo: “Cuesta mucho tener un hogar. Es nuestro techo, nuestro refugio, un lugar donde pasan cosas y marcan nuestras etapas vitales. Por eso, hay que cuidarlo, ordenarlo, mimarlo, amarlo… porque esa casa os lo va a devolver. Las casas nos devuelven toda la energía que le damos multiplicada por mil”, asegura, poniendo el broche de oro a su bonita charla.