Por si aún no te habías dado cuenta: el rosa está de moda. Sí sí, ¡el rosa es tendencia! Pero ojo, no un rosa cualquiera. Sino uno con nombre, apellido ¡y sobrenombre! Estamos hablando del millennial pink, también apodado Tumblr pink. ¿Y eso? Pues porque esta red social (Tumblr) fue la primera en rendirse a sus encantos. La primera, pero no la única. Ya que el efecto dominó fue inmediato: moda, belleza, cosmética y arte cayeron bajo sus influjos tiñéndolo todo de rosa. Y la decoración, ¡también!
Pero este pink power no solo se traduce en textiles y complementos, sino en grandes piezas de mobiliario, como el sofá, y hasta pequeños electrodomésticos, como la línea vintage de Smeg. ¿Que el rosa no es tu color? Te contamos 10 buenas razones por las que a tu casa le sentará de maravilla un poco (o mucho) de millennial pink. ¡Tú también caerás!
1. Es un color... ¿o varios en uno?
Se ha discutido mucho sobre de qué color realmente hablamos cuando hablamos del millennial pink. En un primer momento era una versión muy light del rosa chicle al que le habían quitado todas las notas de azul. Después llegó el rosa cuarzo proclamado por Pantone color del año 2016. Y a este color poco a poco se le fue ampliando la cromática incorporando matices de beige con un punto de blush e incluso tonos híbridos del melocotón-salmón.
En resumen, se trataría de un rosa apagado, un tanto empolvado que abarcaría todos los tonos del rosa pastel. ¿Visualizas el provocativo rosa Barbie? ¡Pues el millennial pink se encontraría en el extremo radicalmente opuesto!
2. Está (y seguirá estando) de moda
Ni más ni menos. Así que si eres de los que estás siempre a la última, no puedes resistirte a este color. Aunque sea con unos cojines, un jarrón o unas simples tazas. Es un must que no puede faltar en casa, porque al millennial pink le queda cuerda para rato.
3. No es solo para chicas
¿Sabías que es el color andrógino del año? ¡Ni la moda for him se libra! El millennial pink ha logrado sepultar la idea de que el rosa es cosa solo de princesitas y niñas pijas. Y esto, traducido en casa, significa que este color puede vestir todas las estancias, sin excepción. Y sin complejos.
4. Es suave sin ser empalagoso
Si eres de los que te sientes cómodo con una decoración minimalista y de base neutra y te mueves entre blancos, grises pálidos y tonos empolvados sin grandes estridencias, este color es perfecto para ti.
Su naturaleza aspastelada lo hace ideal para aportar un sutil toque de color en casa sin temor a caer en lo cursi. Sí, es rosa, pero no es para nada empalagoso. De hecho si te parece empalagoso, es que no es auténtico millennial pink.
5. Es luminoso sin ser soso
¡Hay vida más allá del blanco! No es que el blanco sea aburrido, pero tampoco es el color más alegre de la paleta cromática, no nos engañemos. El millennial pink es una buena alternativa para dar claridad a una estancia sin tener que rendirse al socorrido blanco. ¿Por qué no pintar las paredes del salón de este color? ¿Te atreves?
6. Es muy fácil de combinar
Cuesta dar con un color con el que el millennial pink no encaje. Se mueve como pez en el agua con los colores pastel y los tonos más suaves de la paleta cromática, pero a la vez equilibra la intensidad de colores con mucha personalidad, como el azul petróleo o incluso el rojo. Sí, sí, rojo y rosa, que parecían destinados a no entenderse, son el nuevo tándem de moda. La intensidad de uno queda matizado por la calma y bajas revoluciones del rosa. Si buscas un look de lo más fashion y atrevido en casa, pon en práctico este combo. Eso sí, mejor empezar por pequeños detalles, como una composición de cojines.
7. Es (doblemente) fresco
Cromáticamente es un color que transmite frescor. Y simbólicamente es fresco porque está tan rabiosamente de actualidad, que apostar por una vajilla, un jarrón o unas sábanas millennial pink dará un carácter renovado y a la última a tu mesa o a tu cama.
8. Es amablemente relajante
Es un color desaturado y, como tal, invita a la calma y al relax. Razón de más por la que el mundo de la decoración le ha abierto sus brazos de par en par. ¿Acaso hay algo que nos apetezca más al llegar a casa que relajarnos y darle un portazo al estrés? Es un color gentil que ya sea en pequeñas dosis o a toda pared, creará una atmósfera sosegada y amable, pero con personalidad.
9. Es nostálgico sin ser ñoño
Millennial pink le debe al nombre a la generación millennial, aquella nacida a finales de los 80's y los 90's. Y si había un color de moda durante esos años ese era el rosa. Lo lució una pre-adolescente Britney Spears en los pompones de sus coletas en Baby, one more time y mucho antes la actriz Molly Ringwald lo había convertido en su color fetiche en la icónica película La chica de rosa. Ahora, con el revival de los 90's, ¿por qué nos sorprende que el rosa vuelva a estar de moda? Lo retro mola.
10. Es eco-chic
Al millennial pink le siente de maravilla todo lo natural: suelos y muebles de madera, paredes blancas, alfombras de fibras, textiles de lino u algodón, complementos de cerámica en acabado mate, detalles de cobre, plantas frondosas de hojas verdes... El mix de todos estos elementos es una decoración urbana, sencilla y sin artificios, muy en sintonía con el estilo nórdico. Por algo al millennial pink se le conoce también como scandi pink, o rosa nórdico, vaya.
¿Con ganas de ponerte morado de rosa? Visita nuestra galería y descubre las posibilidades de este color de moda. Y si quieres completar la paleta cromática no te pierdas los otros colores que también son tendencia esta primavera, además del verde Greenery, por supuesto, y del millennial pink.