Muebles a medida: estos cabeceros son muy ingeniosos

 El interiorista Iñaki Mujika fue el encargado de crear este cabecero que aprovecha la altura. En una sola pared integra estante, mesillas de noche y armarios. Todo en un mueble de 320 x 40 x 230 cm. De DM lacado en blanco, se funde con las paredes y queda muy discreto.

 “Este cabecero se ubica en la pared que coincide con el tiro de la chimenea del salón, en la planta baja. Salvamos la forma original creando un mueble a medida que llega hasta el techo y queda por delante de esta columna." Explica Inaki.

 Inaki nos detalla: "Añadimos cajones a la altura de la cama para que hicieran de mesillas y una zona de armarios altos arriba. En el cabecero hay un estante para libros o fotos. Sus listones en horizontal ensanchan visualmente el dormitorio".

Además de los cajones emportrados incorporaron una balda extraíble sirve de superficie de apoyo y se enconde cuando no la necesitas.

Cuando la necesites, puedes sacar la mesita de la pared y usarla para dejar tu móvil, el libro que estás leyendo o un vaso de agua.

Si no la necesitas, la superficie se recoge fácilmente dejándote toda la pared libre de obstáculos. ¿Habías visto algo más práctico que esto?

Este diseño en L de Cristina Pérez va un punto más allá de la praticidad y el orden. Es perfecto para aquellos que necesitan tener un lugar de trabajo en el mismo dormitorio, ya que aúna la capacidad de las estanterías, unos buenos armarios y un escritorio. Uno de los rincones mejor aprovechados.

Mientras que el cabecero está compuesto por una pared de madera y una hornacina decorativa, uno de los laterales está cubierto por armarios blancos que pasan casi desapercibidos y se confunden con las paredes. Cama en, En Línea Barcelona. Armario realizado por Cadri Interiors. Lámpara de flexo, en Tolomeo.

Podemos apreciar el detalle del flexo, que se incorpora al cabecero, dándonos luz para leer y prescindiendo de mesita de noche. Cuando no tienes mucho espacio, necesitas un cabecero que lo de todo, y aquí tienes más.

 El sencillo cabecero de madera en color gris solo tiene una superficie que sirve de mesita y se integra con las paredes del vestidor en uno de los laterales. El gris está combinado con los tonos azules y verdes, frescos y naturales. El techo de tablones de madera es todo un punto adicional para hacerlo más acogedor. Cabecero y cama a medida, en Home Deco. Banqueta, de Ikea.

Un cabecero que ocupa todo el ancho de la habitación y que, además de hornacinas a los lados, incluye mesitas con cajoneras para tener más espacio de almacenaje. Todo está hecho en color blanco y solo añade algunos detalles en gris a través de la ropa de cama y los flexos. Cabecero recuperado por, Cado Interiors. Lámpara flexo, en Sacum.

La sencillez de los tablones de madera contrasta con el color gris oscuro. La posibilidad de crear un cabecero que cambie según tu ánimo, solo lo da un espacio así. Hoy poner unos cuadros apoyados en la pared y mañana, quien sabe, tal vez unas velitas, tus fotos favoritas o detalles tipográficos. Cabecero y mesitas de noche, diseño de Grup Escrivá Interiors realizado a medida. Cuadros, en Cottage Little House. Lámpara, en Velafusta.

 En tonos claros Este dormitorio está lleno de romanticismo. El cabecero de madera blanca va de pared a pared y apenas deja sitio para las mesitas de noche. De nuevo vemos cómo este tipo de muebles permite decorarlos de formas muy distintas.  

Un pequeño tabique separa la cama del baño aportando cierta intimidad y creando un efecto muy acogedor a través del cabecero. Diseño de Anna Mercadé. Mesita de noche, de Carmen Caubet.

 Está detrás de la cama, sirve de cabecero, y al otro lado crea un cómodo vestidor. Cama y armarios de Ikea. Lámparas de flexo, Modelo Tolomeo, de Artemide.

Un poco de luz Sobre el armario bajo, un flexo da la luz justa para leer o si solo un miembro de la pareja se levanta y se viste y así no deslumbra al otro.

 Este cabecero es de DM pintado hace de separador de ambientes y también incluye una hornacina muy práctica,  una solución ideal cuando no cabe una mesita de noche. Cabecero y cortinas del estudio de la decoradora Pilar Sanchís.

 Una pequeña base de madera es más que suficiente. Puedes colocar pequeñas macetas sobre tu cabecero, como ves aquí y con velas aromáticas para crear un santuario de paz.