El baño, junto con la cocina, es una de las estancias de la casa a las que mejor les sienta una buena reforma. No se trata solo de lavarle la cara o hacer un cambio de imagen, como podría pasar con el salón. Sino de ganar confort, bienestar y ahorro. ¡Y sin necesidad de hacer grandes obras! Descubre cómo puedes poner tu baño a la última sin tener que tirarlo todo abajo.

1. Bajolavabo: más capaz y ligero

Con solo cambiar el mueble tu baño parecerá otro. Así de fácil. ¡Lo "difícil" es elegir entre el enorme abanico de posibilidades que ofrecen las diferentes firmas especializadas en baño! Para dar con la mejor opción es básico que tengas claro qué buscas con el cambio: ganar almacenaje en el baño, sensación de ligereza y amplitud, claridad... Los diseños suspendidos, de tonos claros y acabado brillante son una opción que siempre funciona, ya sea en baños amplios como, sobre todo, en pocos metros. En este sentido, si cuentas con el espacio justo, valora planificar un mueble bajolavabo uno a medida: es una opción más cara que uno estándar pero exprimirás cada cm de tu baño.

2. Estrena encimera

Mueble y encimera son dos cambios que suelen ir de la mano, por lo que nunca está de más elegirlos en sintonía. Mármol, cerámica, sintéticos, madera, microcemento... Elegir uno u otro material dependerá del presupuesto del que disponga y de tus gustos personales. En cualquier caso, antes de decidirte valora los pros y los contras de cada opción.

3. Lavamanos: mucho más que diseño

Hoy en día existen piezas escultóricas de gran valor estético, pero al renovar el lavamanos es importante que, además de tus gustos, no olvides el día a día. Y es que el lavamanos debe ser ante todo práctico.

Si cuentas con poco espacio, los modelos encastrados liberan una mayor superficie de encimera y, a la vez, pasan totalmente desapercibidos. El único "pero" es que se comen unos cm de espacio de almacén. Los modelos de superficie son los más estéticos y están disponibles en infinidad de formas –ovaladas, cuadradas, rectangulares, redondas...– y materiales –cerámica, porcelana, resina, piedra y cristal–.

4. Grifería: estética y ahorro

Es uno de los cambios que repercutirá más directamente en la factura, sobre todo si tu grifería era antigua. Los nuevos modelos incorporan limitadores de caudal y cartuchos eco que permiten reducir el consumo de agua en el baño hasta en un 50% sin que lo notes. En cuanto a los diseños, las griferías murales liberan la superficie de encimera y las electrónicas tienen la ventaja de encenderse solo cuando detectan las manos. Esta opción es muy práctica cuando hay peques en casa, ya que se evitan consumos excesivos debido a descuidos. A los tradicionales acabados cromo mate o brillante se suman la opción de color –como la grifería Mood blanco o la Urban negro, ambas de Noken, de Porcelanosa– y los acabados oro, titanio o cobre – como la Chelsea, también de Noken–, que son tendencia.

5. Paredes nuevas sin obras

Es posible estrenar paredes sin tener que arrancar las baldosas antiguas. Así, a la posibilidad del microcemento, se suman otros materiales, como el XLight de Porcelanosa. Se trata de un revestimiento porcelánico muy resistente, de gran formato (300 x 100 cm y 100 x 100 cm) y espesores extremadamente finos (3,5 mm), que gracias a un sobre-alicatado evitar que tengas que arrancar las baldosas antiguas.

6. Pavimentos continuos

Como con las paredes, hay materiales que pueden instalarse sobre el pavimento antiguo sin tener que arrancarlo. El microcemento, por ejemplo, es una opción muy práctica en reformas ya que basta con que el suelo esté nivelado.

Su mayor ventaja es que es un suelo continuo, es decir, elimina las molestas juntas. Otras opciones son los laminados especiales para zonas húmedas que se instalan sobre el pavimento anterior con el sistema click. También con el sistema click se instalan los nuevos suelos vinílicos, que pueden imitar cualquier material.

7. Nueva mampara, más confort

Si decides instalar una mampara o cambiar la que tienes, debes primar sobre todo la calidad de la perfilería –de aluminio o acero inoxidable– y del vidrio –securizado y con espesores de entre 4 y 8 mm–. Con un acabado antical facilitarás el mantenimiento.

8. Convierte tu baño en un mini spa

Puestos a renovar el baño, valora la opción de instalar una columna de ducha. Los nuevos modelos están pensados para adaptarse a cualquier baño sin apenas obras. Las posibilidades son enormes: desde diseños básicos que incluyen tan solo las opciones de ducha fija con cascada de agua y teleducha hasta los modelos más completos que ofrecen aromaterapia, cromoterapia, música y funciones combinadas de hidromasaje, como la Touch de System Pool.

9. Iluminación más eficiente

Gracias a las nuevas bombillas led no es necesario que cambies los apliques o los focos empotrados para poder disfrutar de las ventajas de estas fuentes de luz.

A día de hoy, los led se comercializan en los tipos de casquillos más comunes, por lo que ya no es necesario cambiar la lámpara como ocurría antes. Piensa que si sustituyes las bombillas por leds podrás ahorrar hasta un 80% de energía.

10. Espejito, espejito...

Es uno de los cambios más fáciles y que, proporcionalmente, da mejores resultados. Si tu baño es pequeño no lo dudes: opta por un espejo XL. Alárgalo hasta el techo y gana sensación de amplitud.