Más de 40 ideas para renovar el salón con la mínima inversión (con shopping)

Una idea económica para renovar el salón sin cambiar los muebles es cambiando las fundas de los cojines. Puedes añadir 4 lisas y 2 estampadas para 6 cojines, puedes encontrarlos desde 10 € con diseños muy bonitos. Y también para la funda del sofá. Es fundamental que quede bien ajustada. ¿Tu sofá es de Ikea? Hay fundas para sofás muy económicas. 

Introduce una butaca que actualice la decoración del salón y lo personalice como en este acogedor y luminoso salón. También puedes añadir un par de pufs que actuarán como asiento extra.

Un buen ejemplo es este modelo de terciopelo de La Redoute, disponible en varios colores. Mide 34cm de diámetro y 44 cm de altura. PRECIO: 44€

Una idea perfecta para actualizar salones modernos y cambiar el aspecto del mueble de salón con la mínima inversión. Recuerda que, dependiendo del tipo de material con el que esté hecho el mueble tendrás que aplicar primero la imprimación y después la pintura o esmalte.

Una opción es la pintura a la tiza, que no necesita imprimación (solo si está barnizada o es de melamina). Hazte con un bote de pintura a la tiza Chalky Finish Rust-Oleum, de Bruguer, en color blanco antiguo. PRECIO: 13,10 € 

Deshazte de ese diseño algo anticuado y desgastado. Hay mesas de centro desde 60-90 € (en materiales laminados y de reducidas dimensiones) hasta 300 € (en madera y de tamaño grande). 

Quizá te interese más combinar 2 o 3 mesas auxiliares delante del sofá, que son más fáciles de desplazar cuando necesites despejar la zona frente al televisor (como zona de juegos infantiles, para hacer ejercicio...). Para dos mesas de 50 x 50 cm necesitas un hueco de 180 x 140 cm libre delante de los asientos.

Una de las mejores ideas para renovar el salón de la manera más fácil. Lo que coloques llamará la atención. Agrupa en una bandeja (20-30 €) 3-4 objetos de diferente altura: una vela en vaso (5-10 €), un candelabro (15 €), una planta verde (10 €), una campana de cristal (20 €). 

Pon visillos estampados en lugar de caídas o sustituye las tuyas por otras confeccionadas con telas descatalogadas de firmas o restos de colección. Echa un vistazo al outlet online de Gancedo o Laura Ashley con descuentos de hasta el 50% en telas de calidad.

Instala focos en la parte superior o bien apliques con pinza. Si no quieres ver cables, también puedes repartir varias lamparitas recargables con batería.

Si no quieres ver cables, las lámparas portátiles y recargables son una estupenda opción. Esta, por ejemplo, es el modelo Balum, de Sklum, con asa y varios acabados disponibles. PRECIO: 34,95 €.

Añade un reposapiés para la butaca o una chaise longue nueva. Además, un plaid, un cojín y una funda acolchada para cojín para lograr un rincón súper acogedor.

Una mesita auxiliar liviana en la que dejar el libro y la taza de té acompañará a la butaca y le dará calidez al conjunto.

¡O ambas! Con la pintura Haz que juegue a favor del espacio. Con muebles oscuros funciona el blanco roto, dará luminosidad (referencia universal NCS S 0502). Con muebles claros y para ganar calidez, un arena (NCS S1002). En espacios mini, apuesta por tonos suaves. Los azules grisáceos son sosegados (como NCS S 1502). Pintura plástica: 4-10 €/l. También hay molduras, las de poliuretano son fáciles de pegar con adhesivo en paredes lisas. Desde 10,97 € 2 m en oracdecor.com. 

El vinílico es el más resistente y se limpia con un paño húmedo. El formato habitual es en rollo (de 100 x 53 cm. Salen 4 tiras que cubren 5,3 m² aproximadamente). Los modelos más tradicionales con motivos naturales te ayudarán, hay muchísimos. 

Si quieres estrenar sofá, puedes. Basta con renovar las fundas para que parezca nuevo. Además, al poder quitarlas sin dificultad, las puedes limpiar más a menudo. Las mejores fundas son las que se ajustan a la perfección sin dejar arrugas y están hechas con telas lavables que no encogen. Escógelas en tonos neutros para que la visión del sofá en el ambiente sea equilibrada. 

Muy útiles para organizar revistas y los mandos debajo de la mesa. Elige un diseño bonito que decore y te permita tener las mantas dobladas cerca del sofá. Las de fibra darán un toque muy natural y fresco.

Tres de las cuatro esquinas del salón deben estar iluminadas. Unifica el color de las bombillas a luz cálida entre 2700 y 3000K (4-6 €/unidad). Es una gran idea para renovar el salón y darle un look más cálido.

Añade tiras de led bajo un mueble suspendido, detrás del respaldo del sofá, en los estantes de la librería. Y candilejas. Es la iluminación perimetral del techo. Instálala con molduras que incorporan la tira led en el encuentro entre pared y techo. Encuentras tiras led con enchufe en Leroy Merlin de 1,5 m, con mando por un PRECIO de 17,99 €.

Cuelga el televisor en la pared con un soporte adecuado y despeja el mueble, o sustitúyelo por uno de fondo reducido. Otra opción es colocar un soporte de televisión. 

Con vistosas patas (desde 6 €) y tiradores (8 € /1 unidades, en Zara Home). Incluso puedes forrar con vinilo (minirrollo efecto mármol, 45 x 200 cm, en Leroy Merlin) algún frente o decorarlo con tiras de latón pegadas (3,99 € / 10 unidades en occre.com). Así conseguirás cambiar el aspecto del mueble del salón, ¡parecerá nuevo!

¿Quién dice que una librería metálica no puede aligerar la decoración de un salón? Este diseño es buena muestra de ello. Su estilo rompe con el resto de la decoración y supone un soplo de aire fresco en el salón. Además, al estar realizada a medida aprovecha todo el vano de la pared con una profundidad que no supera los 30 cm, más que suficiente para albergar libros y otros objetos. Por otro lado, el efecto metálico de sus baldas no solo realza los elementos que alberga, también multiplica la luz natural.

Pinta el pie y sustituye la pantalla. ¡Renovada por un presupuesto reducido! En luzvintage.es puedes encargar una a medida de la forma y tamaño que necesites con la tela que más te guste.

El modelo Rixy de La Redoute es perfecto para dejar las mantas y colocarlo a un lateral de sofá. Tiene una altura de 38 cm y un diámetro de 30 cm. PRECIO: 11,89€

Para delimitar el ambiente y ganar sitio para sentarse. Queda genial debajo de una ventana con colchonetas que lo hagan confortable.

Puedes pintar las puertas tú misma (la opción más económica) con esmalte, laca o pintura a la tiza y sale por 20-30 € cada una, o lacar (lo hacen los profesionales) y cuesta 100-200 € por puerta. El blanco puro o roto es actual, pero también resulta personal escoger un tono como topo o piedra.

Una puerta lisa, maciza y lacada en blanco cuesta 250 € (100 € más con cristales). En el salón es habitual encontrar doble hoja o 1 hoja y 1 fijo. ¿Y si prescindes de puertas y dejas solo la embocadura? Las tapetas para una embocadura de hueco doble (120 cm), 180 €, en Puertas Garrido.

Sustitúyelo por uno alto (de 10-12 cm) y en un color que contraste con el suelo. Convencional, recto y lacado: unos 8 €/m. Lo hay que se instala sobre el existente sin necesidad de retirarlo (10-12 €/m en Orac Decor).

¡Con volumen! Más allá de cuadros y fotos, decóralas con bandejas de fibra, platos bonitos, relojes, palabras luminosas... Si no pesan demasiado, usa cinta de doble cara para fijarlas. Calcula un presupuesto de 80-100 € para la composición. 

Estos cestos decorativos para pared, el modelo Yokou, de La Redoute, dotarán a tu pared de dinamismo y un punto divertido. PRECIO: 55,79 € 

Los espejos de cuarterones, también llamados tipo ventana, dan profundidad y son ideales para decorar la pared del sofá. Cuélgalo a 30-40 cm desde el respaldo. 

¿Tienes un mueble viejo arrinconado y no sabes qué hacer con él? Míralo con buenos ojos, porque quizás con una pátina de pintura puede convertirse en un hit de la decoración de tu salón. Los acabados lavados o envejecidos son los más habituales y, además, están de moda. Si es tu primera vez, haz la prueba en una pieza pequeña para ver el resultado y, si te convence, repítelo en la pieza escogida. 

Están ahí, aunque a veces pasen desapercibidas y, sin embargo, al cambiarlas, las alfombras modifican por completo la percepción de tu salón. Si puedes, lo más práctico es tener una de lana o algodón para el invierno y un modelo de fibras naturales para los meses más calurosos. Aunque también puedes ser creativa y combinar dos a la vez. Hay alfombras baratas, perfectas para renovar el salón sin gastar mucho. 

Araña un poco de espacio para un auxiliar, ya sea tras el sofá, junto a la ventana o en un rincón. Además de ganar espacio de almacén, servirá de superficie de apoyo para piezas decorativas y destacadas, como una lámpara de un color intenso por ejemplo. 

Úsalo como asiento auxiliar o como mesa con una bandeja encima. Encuentras un modelo con almacenaje, en color beige, por un PRECIO de 303€. 

Puedes crear un bonito “efecto invernadero” en el salón combinando plantas de distintas variedades y alturas. Si las eliges con flor, mejor si son de tonos similares, así crearás una composición más armónica. Las plantas, además de bellas, son fuente de bienestar, ya que incrementan la humedad y pueden reducir hasta un 80% las sustancias tóxicas presentes en pinturas y productos de limpieza. Al decidir su ubicación, asegúrate de que no interfieran el paso de la luz. Elige varias plantas de interior y crea tu propia jungla urbana. 

En ocasiones basta un único elemento para redefinir el estilo de un espacio y, según el ambiente, darle una sofisticada nota cálida o un toque de rabiosa actualidad. Una lámpara de techo tipo chandelier o una lámpara de pie con una pantalla especial pueden transformar una estancia.

Los objetos en compañía siempre son mejores. Toma nota: elige varios recipientes (vasos, copas, vasitos...) en distintos acabados (transparente, tallado, pintado...) y deja que la belleza del verde y las flores y el paso de la luz natural pongan una luminosa nota a modo de composición sobre la mesa de centro o una auxiliar. 

Una pieza antigua o de almoneda puede convertir ese rincón olvidado del salón en uno de lo más especial. En el segundo ambiente de la galería verás que se ha recuperado un escritorio de aire colonial para crear una zona de despacho muy personal. Ten en cuenta que, en apenas 3 m2, puedes colocar una mesa de trabajo y una silla con ruedas. 

Están ahí, pero no siempre les sacamos el partido que se merecen. Y es que las ventanas pueden convertirse en unas protagonistas más de la decoración con una buena elección de las cortinas. Combina dos caídas de telas: una lisa y transparente y otra bicolor y satinada por ejemplo. Triunfan los básicos: tonos suaves (crudos, piedras, grises...) en una amplia variedad de texturas. Si prefieres un estor y una cortina, elige un tipo paqueto y una cortina tupida. 

No se trata de pintar todo el salón, basta con destacar una de sus paredes con un tono más intenso. Es un cambio fácil, rápido y muy efectivo, según la tonalidad que elijas. Puedes optar por tonos de su misma gama, si quieres un contraste más moderado, o por una tonalidad oscura, sobre todo en salones luminosos.