Se llevan las cocinas paneladas: 20 ideas para elegir la tuya

El open concept, es decir, las cocinas abiertas al salón han traído consigo una nueva tendencia: los diseños panelados. ¿Y qué se consigue con ellos? Tener una visión de la cocina más ordenada, limpia y amplia, vista desde el salón. Esa percepción se multiplica si el mobiliario es blanco, como el de esta cocina diseñada por la interiorista Pía Capdevila quien ha revestido todo un frente para ocultar los electrodomésticos.

Las cocinas paneladas pueden disfrutarse en cualquier estilo: de las cocinas más modernas a las más retro. Y si no mira esta con ese toque rústico vintage. Combina espacios abiertos y ligeros con un frontal alistonado al fondo, que lo mismo sirve para almacenar menaje, conservas o el frigorífico. Ha sido diseñada por el interiorista Roger Bellera para dar uniformidad al espacio.

Otro ejemplo de cocina panelada, pero esta vez con cierto aire industrial. Y todo gracias al material con el que está fabricado el frontal, que alberga dos neveras y armarios altos: un acero inoxidable ¡a prueba de huellas! La magnífica idea fue de la interiorista Olivia Reina para facilitar su limpieza. La ausencia de tiradores logra dar continuidad a la pared.

Siempre nos han dicho que es mejor panelar las cocinas grandes, pero viendo esta de reducidas dimensiones puede que cambiemos de idea. La interiorista Mercedes Pérez ha optado por un frente de puertas en color topo, a juego con la península, dejando solo a la vista el horno. ¿Te has fijado en los tiradores XL de la derecha? Así en ellos se pueden dejar los paños de cocina, bien estirados para que se sequen o como elemento decorativo.

Los hornos son los únicos electrodomésticos que quedan a la vista en las cocinas paneladas. Suelen ir en columna, como aquí, o en paralelo, uno al lado del otro. ¿Quieres un truco para que ambos cuando están en horizontal queden a la misma altura? Coloca un cajón interior bajo el micro, que suele ser más pequeño que el horno, y panélalo del mismo material: acero inoxidable, cristal negro, madera... Así quedarán simétricos y mejor integrados. La interiorista Isabelle Mattera ha revestido esta cocina toda de madera, incluidas las paredes, para darle ese aspecto tan acogedor de cabaña.

Si no te gusta ese aspecto de cocina uniforme y prefieres un diseño que rompa esa homogeneidad, atenta a este frente ideado por Pía Capdevila. La interiorista ha elegido unas puertas con molduras lacadas en gris y pequeños tiradores en acero inoxidable que le dan dinamismo. Dentro de los armarios hay espacio para ocultar el frigorífico, la lavadora y la caldera.

Además de los electrodomésticos y los utensilios de limpieza ¿qué más puedes guardar en los frentes panelados de tu cocina? Por ejemplo, puedes reservar uno para organizar la vajilla, como este ideado por la interiorista Marta Tobella en una zona de paso. Antes de organizar tu vajillero, piensa en el número de platos, copas y vasos que tienes, y en función de ello diseña tú misma el interior de los armarios y la altura a la que quieres cada balda. Así, podrás colocar todo y mantener el orden. 

Los diseños de los frentes panelados pueden ser de diferentes tamaños: cuadrados o rectangulares, con baldas y cajones o verticales , como este armario diseñado por Irene Subirana, para almacenar los útiles de la plancha, escobas o el cubo de la fregona. Un detalle muy importante: acuérdate de instalar en los armarios de la limpieza un enchufe. ¡Te vendrá fenomenal para poner en marcha cualquier pequeño electrodoméstico!

Cuando los armarios panelados están junto a la encimera, conviene poner una pieza de remate entre ambos. Se llama copete y gracias a él, evitarás, por ejemplo, que si se derrama algún líquido en la superficie, no llegue a entrar en el mueble. Así prolongarás su vida. En esta de la imagen diseñada en gris antracita y madera de roble por la interiorista Belén Campos, el fregadero está flanqueado por dos columnas, a un lado la nevera integrada y al otro los hornos a la vista.

Beneficiarse de las ventajas de una cocina abierta —tener todo a la vista— y las que ofrece una panelada —mantener el orden— es un doble acierto. Por eso, lo arquitectos Ana Blanco y Fran Mengíbar eligieron este tipo de cocina mixta en su casa. Y además, introdujeron una tercera posibilidad: instalar en los armarios puertas acristaladas a modo de vitrinas. Así aligeran la estancia y exhiben la vajilla bonita sin que coja polvo.

Esta cocina combina estanterías abiertas con armarios panelados y vitrinas acristaladas. Y por si fuera poco, la interiorista Katy Linder responsable del proyecto introduce un nuevo elemento ¡un frente de espejos! Sin duda una excelente solución para ampliar el espacio.

Aquí tienes un ejemplo de cocina estrecha y panelada con armarios alargados por arriba —sin llegar al techo— y más amplios por abajo. Si vas a utilizar alguno como despensa, opta por cajones amplios que mantienen mejor el orden y coloca los botes y tarros que pesen más en la zona inferior. La interiorista Natalia Zubizarreta combinó aquí los frentes blancos de los armarios con un papel pintado textil en un tono beis que le da luminosidad y calidez.

¿Pero dónde está la cocina, te preguntarás al mirar esta foto? ¡Y no es para menos! Los estantes abiertos de roble, las lámparas de diseño, el grandioso espejo o los pequeños frentes panelados, a juego con las molduras del comedor, han hecho que la cocina en sí casi desaparezca del mapa. La responsable de la hazaña es la interiorista Miriam Barrio.

Por mucho que sea el electrodoméstico estrella de la cocina, la lavadora no es estéticamente bonita. Por eso, las cocinas modernas procuran ocultarla a la vista. La interiorista Miriam Barrio ha panelado en esta cocina la lavadora y el frigorífico. Con una puerta con molduras y un pomo dorado ¡nadie sabrá qué esconde el interior de este armario!