Primero a la vista y, por supuesto, a nuestro cuerpo. Y esto se consigue con los textiles de la cama: cojines y almohadones. "que sea blandito. Un dormitorio para que te haga feliz debe serlo -señalan desde Banana Home Agency- Cuando vemos una cama bien armada, con edredón gordito, almohadones, mantas, plaids… nos invade una sensación de gusto indescriptible. No te cortes en tu habitación, esto no es exclusivo de las revistas. Y en este punto, presta mucha atención también al tacto. Rodéate de textiles suaves y agradables que te mimen".
Cabecero, banqueta y lámpara de Coton et Bois y mesita de noche de Brucs.