Las cocinas que verás en el número de enero de El Mueble han sabido reinventarse para sacar su mejor versión. En algunos casos ha bastado con tirar tabique para llenarlas de luz y sensación de espacio y, en otros, un simple cambio de color de muebles ha sido suficiente.

La mayoría apuestan por el blanco, los toques de estilo y los frentes panelados para ser mucho más limpias e integradas al resto de decoración. Las que cuentan con suficiente espacio tienen isla y las más pequeñas soluciones ingeniosas para ganar almacenaje. En la ciudad, el campo o la montaña no te pierdas ni un detalle de sus proyectos.