Ventajas e inconvenientes de todos los tipos de armarios que imagines: GUÍA para elegir el ideal

Lo más importante es que debe quedar delante del armario el espacio de apertura de la puerta despejado. Pueden ser puertas altas o en dos piezas (una para el maletero). Llevan varias bisagras. Mejor con cierre ralentizado para que no den golpe.

• VENTAJAS: Permiten que se visualice el interior del armario de un vistazo cuando se abren. La apertura total da acceso completo al interior del armario, lo que facilita la organización y la visibilidad de todas las prendas o accesorios.
• INCONVENIENTES: Así que hay que tener en cuenta la distancia mencionada entre armario y mueble o pared enfrentados y el ancho de la puerta.

Este tipo de armarios "pierde" unos centímetros para las guías por las que se deslizan las puertas, por lo que el interior es de menor fondo o se amplía el fondo del mismo. No pueden llevar tiradores que sobresalgan.

• VENTAJAS: Es ideal cuando hay poco espacio entre el armario y la pared porque las puertas se deslizan sobre ellas mismas. Se ahorra espacio. Se ganan centímetros. Son seguros en habitaciones infantiles para evitar golpes con las puertas abiertas.
• INCONVENIENTES: El espacio que se pierde por las guías. Los paneles grandes dejan ver un lado u otro del armario cuando se abren, nunca todo el interior. Acceder al interior también "se hace por fases". Puede ser más costoso inicialmente.

Se suelen diseñar sin frentes, de manera que se ve todo el interior. Se usan mucho en espacios concebidos como vestidores. Para elegirlo es importante la ubicación que tendrá el armario, para que tenga cierta privacidad y no recargue el ambiente.

• VENTAJAS: Dejan ver toda la ropa de un vistazo. Son espectaculares. Se ahorra en los frentes. Y son cómodos en el uso.
• INCONVENIENTES: La ropa queda a la vista y expuesta al polvo. El ruido visual que aporta es importante. Hay que cuidar especialmente su organización.

Sean de apertura abatible o corredera, las puertas de cristal son elegantes y sofisticadas. Puedes combinarlas con otras ciegas.

• VENTAJAS: Dejan ver el contenido sin que este quede expuesto a la suciedad. Se puede iluminar el interior y disfrutar de esa luz en el espacio. Se limpian fácilmente. Y dan amplitud.
• INCONVENIENTES: También generan más ruido visual que una puerta ciega porque el interior queda a la vista. El cristal es delicado a los golpes.

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El acabado espejado es luminoso porque refleja la luz y puede aligerar un gran frente, ampliando el espacio.

• VENTAJAS: Aporta luminosidad a la estancia y amplitud. El propio espejo sirve para mirarse.
• INCONVENIENTES: Es indiscreto a las huellas. Es un material pesado y encarece.

Este acabado se puede llevar a una puerta abatible o a una corredera. Está  formado por lamas inclinadas.

• VENTAJAS: Es atemporal, elegante y deja que la ropa respire.
• INCONVENIENTES: Su limpieza es algo engorrosa.

Con rejilla cannage, fibras naturales tipo ratán o telas. Pueden dejar ver el interior o ser ciegos con un tapizado sobre la propia puerta.

• VENTAJAS: Son extra decorativos. Disimulan el interior aunque en algunos casos sin cerrarlo por completo.
• INCONVENIENTES: Son acabados delicados de difícil limpieza. Muchos dejan pasar el polvo.

Las puertas lisas se limpian fácilmente y no tienen recovecos en los que se "quede el polvo". Se adaptan a todos los estilos. Pueden ser de madera, chapadas, laminadas o lacadas en colores. Los diseños de puertas abatibles permiten crear composiciones como esta en la que el paso al baño se integra en el frente de armarios.

Las puertas con molduras, hendiduras, acanalados o cuarterones tienen recovecos en los que se "queda el polvo" más fácilmente que en una puerta lisa. A cambio, permiten enriquecer la estética del frente del armario, ya sea en el mismo material o combinando acabados en el marco y cuarterón. También se pueden realizar patrones y motivos personalizados.

Tanto en puertas lisas como molduradas, se puede integrar el tirador en la propia puerta de manera que no sobresalga ningún pomo. Esto es aplicable al sistema de apertura abatible o corredero. En función de su diseño puede ser un elemento decorativo más, por ejemplo, en frentes lisos, anima el resultado. Pero también puede resultar algo más incómodo para "tirar" de las puertas abatibles.

Hay que tener en cuenta si el tirador puede marcar la pared u otro mueble al abrirse. Quizá esto implique colocar algún tope. El tirador puede ser más o menos grande en tamaño, pero ha de cumplir el objetivo de resultar cómodo para agarrar al tirar de la puerta. Se colocan en puertas abatibles, no en correderas donde se opta por elementos integrados. Los tiradores que sobresalen no dejarían que una puerta se deslizase sobre la otra.

En el caso de los armarios sin puertas es importante elegir un acabado interior acorde con el espacio. Porque queda totalmente expuesto (debe ser de fácil limpieza) y porque interviene en la decoración. Madera, efecto textil, blanco… Pueden ser materiales laminados, melamina, maderas o lacas. Esto influye en el presupuesto. En un armario abierto hay que cuidar también el acabado de los accesorios para que todo tenga unidad. La iluminación no se activa con sensor al abrir la puerta (no hay) sino con interruptor o sensor de movimiento.

En el caso de los armarios con acabado espejo o cristal, hay que tener en cuenta que se pueden escoger modelos coloreados. En el caso del vidrio, también estriado, que disimula el interior. Los espejos envejecidos o ahumados son algo más discretos a las manchas. Y muy elegantes.