Paso 1: Define tu estilo
Lo primero de todo antes de coger las tijeras y ponernos a recortar el papel, vamos a pensar un poco en cuál es nuestro estilo a la hora de envolver regalos. Puede que no sepas de primeras qué estilo tienes o quieres tener. Así que lo que te aconsejo es que empieces haciéndote algunas preguntas para ir descartando ideas y centrándote en las que más te interesan:
- ¿Qué tonalidades o paletas de colores te gustan más? ¿Colores brillantes / colores neutros?
- ¿Qué tipo de papeles te gustan más? ¿Papeles estampados / Papeles lisos / Papeles con flores / Papeles con motivos más minimalistas?
- ¿Qué tipo de decoraciones te gusta añadir? ¿Lazos / cuerda de yute / cordón de algodón / origami / flores y plantas / sellos de lacre...?
- ¿Te gusta envolver regalos elaborados con muchos elementos o prefieres algo más minimalista?
Paso 2: Piensa en los gustos de la persona a quien le haces el regalo
Ahora que ya has definido tu estilo para darle tu toque personal y distintivo vamos a personalizar el regalo todavía más. Partiendo de esa base que has elegido, si quieres que todavía sea un regalo más personalizado, puedes adaptarlo a los gustos y personalidad de la persona a quien le vas a hacer el regalo sin perder tu esencia.
Hazte estas preguntas:
- ¿Es hombre / mujer?
- ¿Qué edad tiene?
- ¿Qué aficiones tiene?
- ¿Le gusta algún color en especial?
- ¿Cómo es la decoración de su casa? ¿De qué estilo/colores/estampados viste?
Paso 3: Busca inspiración
Ahora que ya tienes más claro tu estilo y has reflexionado también sobre los gustos de la otra persona, es hora de buscar inspiración.
Hoy en día lo tenemos muy fácil gracias a Internet. Es una fuente de inspiración genial aunque también puedes echar mano de revistas o libros de manualidades y envoltorios de regalo.
La cuestión es elegir un adorno que haga que el regalo se vea más elegante y no al revés. No queremos recargarlo, así que si crees que en tu caso no necesitas añadirle nada más, tampoco pasa nada. Es mejor saber parar a tiempo que acabar creando un “Frankenstein”.
La finalidad de todo esto, al fin y al cabo, es envolver el regalo para que la persona que lo recibe se sienta especial, que note que lo hemos creado con nuestras manos de manera personalizada con todo nuestro cariño. Para que al final la persona a quien se lo entregas se sorprenda, se ilusione e incluso te acabe diciendo “Qué bonito ¡me da pena abrirlo”.
* Elsa López es diseñadora de envoltorios de regalo y la primera española certificada por la gurú japonesa Shiho Masuda. Su cuenta de Instagram es @cafecongatos_