15 muebles de televisión que no son los típicos y subirán el nivel de tu salón (de obra, con la TV escondida, con puerta corredera...)

Y para quienes gusten de ver la tele desde la cama, bien vale este mueble especialmente diseñado para el dormitorio. La propuesta es de Solange Van Dorssen. Dos frentes de armarios empotrados, blancos, lisos y sin tiradores se dispusieron frente a la cama. A los lados se utilizan para guardar ropa y en el módulo central se encastró la televisión, eso sí, debidamente oculta con unas puertas escamoteables.

Aprovechando el tiro de la chimenea, el Estudio Arquitectura Positiva suspendió la televisión en el mismo módulo. Se pintó de blanco para una mejor integración. A los lados quedan las ventanas con lo que la ventilación está asegurada. Importante: para que el televisor no sufra un exceso de calor, se recomienda elegir mejor una chimenea de gas. 

Sergi Pons, de GDR Vip Grup de Reformas diseñó este mueble de 6 metros de largo en madera de roble que, además de ofrecer mucho almacenaje que no queda a la vista, alberga la chimenea y oculta la televisión. ¡Nos encanta por su estética limpia!

Esta es otra versión de módulo que combina chimenea y televisión. De esta forma el foco de atención se centraliza. En esta ocasión, Deulonder Arquitectura Doméstica lo ubicó en el centro del salón para separarlo de la cocina. La originalidad radica en la presencia de chimenea y televisión por ambas caras, así el calor y el entretenimiento llega a las dos estancias. Chone de la Sotilla y Patricia Palacios crearon una única chimenea y duplicaron la televisión. ¿Una sugerencia? Conviene mantener chimenea y televisión a una distancia de 50 cm como mínimo. 

En localidades de inviernos cálidos no es necesario tener chimenea. Por eso, el arquitecto Fernando García diseñó este mueble a medida, sólo y exclusivamente para la televisión. Se pintó en el mismo color blanco que las paredes y el techo con lo que la luminosidad está más que garantizada. ¿Su truco? Una puerta de persiana que oculta el televisor cuando no se está viendo.

En este salón la interiorista Bárbara Sindreu diseñó un discreto frente de armarios parapetado en la pared. El original mueble mide 4,5 metros ya que ocupa todo un lado. Además de mueble de televisión hace de vajillero, librería y ropero. Al estar lacado en blanco, llegar hasta el techo y no tener tiradores se camufla perfectamente en la pared, mimetizándose con ella. Cuando queremos ver la tele, abrimos la puerta corredera y cuando no, la cerramos y queda oculta.

Esta estantería de madera con cajonera baja podría parecer un mueble de salón tradicional. Pero no es así. El toque innovador lo pone ese panel corredero, ideado por María Just, que oculta en su interior la televisión suspendida. Se ha lacado en color marfil, como las paredes, para dar uniformidad y luminosidad a la estancia.

Si tu salón es pequeño, lo ideal es elegir un mueble para la televisión de obra. Abierto, lacado en blanco y con estantes, como este de la imagen. Diseñada por el arquitecto Rafael Fullana, esta librería cuenta con un hueco central para suspender la televisión. El sofá queda justo enfrente. Recuerda que por cada pulgada que tenga el televisor tiene que haber 4,5 cm de distancia. Si la pantalla es de 40 pulgadas, la TV debe de estar a 1,80 metros del sofá.

Ignacio Dávalos es el artífice de este mueble a medida tan luminoso lacado en blanco. Lo diseñó con molduras, a juego con la chimenea. Las vitrinas vajilleras a los lados cuentan con puertas espejadas que amplían e iluminan el espacio. El hueco central lo reservó para suspender la televisión. Un modelo de Samsung con marco blanco que simula un cuadro. ¡Nos encanta!