Mi salón pequeño era un desastre hasta que apliqué estas 12 ideas de orden y decoración

Destinar la pared del sofá a un mueble a medida es una excelente idea para ganar almacenaje. Eso sí, ten en cuenta que entre el mueble y el sofá debe quedar una zona de paso despejada para evitar que el salón se sienta abarrotado. 

Mira que idea tan estupenda para mantener el orden sin ocupar espacio adicional en el salón: colocar una serie de baldas a medida en un retranqueo de la pared. Si la copias, procura instalar las baldas a una altura aproximada de 30-40 cm entre cada una, para poder almacenar una variedad de objetos de diferentes tamaños, desde libros hasta elementos decorativos.

Esta solución –montar la televisión en una pared decorada con una composición de puertas y estantes– permite aprovechar al máximo el espacio vertical y mantener el área organizada. Lo ideal es que el mueble no tenga más de 30 cm de fondo para no invadir el espacio de paso y que el salón sea un espacio cómodo y funcional. 

En un salón pequeño, una idea muy práctica es optar por un sofá con almacenaje bajo el asiento. Ganarás espacio para guardar desde mantas y cojines, hasta juguetes o juegos de mesa. Procura que el sofá que elijas tenga un sistema de apertura fácil y accesible, como asientos abatibles o cajones deslizantes.

En un salón pequeño, acompañar el sofá con una mesa de centro con almacenamiento integrado es una excelente decisión. Así que, ya sabes, busca un modelo con cajones o estantes inferiores donde se puedan guardar mandos a distancia, revistas o cualquier otro objeto que necesites que esté al alcance pero fuera de la vista. 

Una alternativa práctica a las mesas auxiliares que se suelen colocar a los lados del sofá es optar por una estantería baja, en la que colocar lámparas, libros y otros objetos. Procura que no sea muy alta (que mida entre 50-60 cm) para que esté a nivel con el brazo del sofá.

Los muebles a medida son siempre la mejor opción para salones pequeños, y ya no solo porque se adaptan como un guante al espacio disponible, sino también porque se pueden diseñar con compartimentos abiertos y cerrados para dejar a la vista los elementos decorativos y ocultar otros objetos menos estéticos. Justo lo que necesitas para presumir de salón ordenado y funcional.

¿Y si en lugar de la mesa de centro tradicional, colocas dos mesitas como éstas? Ocupan poco espacio, podrás cambiarlas de sitio fácilmente según las necesidades del momento y, lo mejor, en su interior podrás guardar esas pequeñas cosas que nunca recuerdas dónde las dejaste.

Como ves, tienes muchas otras opciones a las mesas tradicionales. En este caso, un carrito con estantes puede servir también como mesita auxiliar. Elige un modelo con una altura de aproximadamente 60-70 cm para que esté al nivel del sofá y una profundidad de 30-40 cm para no invadir demasiado la zona de paso. 

Debajo de la mesa de centro, en la estantería o repartidas por puntos estratégicos de tu salón. Las cestas son geniales para organizar esas pequeñas cosas que siempre acaban perdidas por el salón. Además, su look natural está más de moda que nunca y encaja con distintos estilos de decoración.

Optar por muebles y accesorios con líneas limpias y colores neutros como blancos, grises o tonos tierra te ayudará a crear una sensación de orden y calma en tu salón. Eso, y mantener las superficies despejadas, dedicar tiempo regularmente a organizar y limpiar. Evita patrones muy complejos o colores vibrantes que puedan hacer que el ambiente se vea abarrotado, muebles que ofrezcan almacenamiento integrado y soluciones discretas para guardar objetos, como estantes cerrados o cestas decorativas.

A diferencia de una estantería abierta, una vitrina ofrece la ventaja de proteger los objetos del polvo y la suciedad. Podrás utilizarla para guardar vajillas, cristalería y otros objetos decorativos especiale. Evita saturar los estantes para mantener una presentación ordenada y equilibrada.