Literas, camas nido y tipo tren: las mejores soluciones para habitaciones compartidas

A grandes problemas, muebles a medida. Como en esta habitación compartida en la que la ventana impedía apostar por una litera convencional. La decoradora Natalia Gomez Angelats salvó este obstáculo con una litera en ángulo que, además, permite aprovechar el ancho de la habitación. Y como toque divertido: una red sustituye la tradicional barandilla: protección y originalidad.

Esta litera parece convencional... pero no lo es, porque la cama inferior se ha prolongado para que sean dos en línea, lo que permite dar cabida a tres niños. Además, durante el día, la completísima cama inferior sirve de sofá y zona de juegos extra. 

¿Qué pasa cuando dos hermanos comparten habitación y quieren invitar a un amiguito a dormir? O tiras de cama nido, si te cabe, o apuestas por una solución tan ingeniosa como esta. Se trata de una cama alta doble con una zona inferior a modo de tarima con dos camas extras. Basta con subir o bajar colchones para que donde duermen dos duerman cuatro. 

Esta litera abatible es casi casi mágica. Y es que por la noche aparece y durante el día desaparece, dejando un espacio despejado para jugar sin obstáculos. Es una solución muy práctica cuando quieres disfrutar del máximo espacio libre en el dormitorio sin camas que se "coman" espacio. 

En habitaciones compartidas por más de dos niños o pensadas para recibir de manera habitual, como por ejemplo en las segundas residencias, una litera doble como esta es una opción muy práctica que, además, puedes incluso equipar con dos camas extra nido. El único "pero" es que para colocarlas en línea necesitarás una pared de más de 4 metros libres. 

Organizar las camas en "L" es una opción muy cómoda en habitaciones infantiles de planta cuadrada, ya que se distribuye las camas de manera perimetral dejando un espacio central despejado. Aquí, además, una de las camas es nido, lo que permite ganar una cama extra de manera ocasional. El ángulo entre las dos camas se ha aprovechado como mesilla de noche. 

Esta litera tren cuenta con un completísimo vestidor integrado en su estructura. De hecho, ¡los niños pueden entrar dentro! Se ha cerrado con puertas correderas con los frontales de pizarra para que los peques puedan hacer sus creaciones. Además, se ha completado con tres mini bandejas integradas en la estructura a modo de mesillas donde dejar desde sus cuentos hasta sus pequeños tesoros. 

Ni literas ni camas convencionales. La decoradora Bárbara Chapartegui ideó para esta habitación compartida dos camas "voladoras" sujetadas al techo por cuerdas, que complementan las dos camas inferiores que, para ser aún más versátiles, cuentan con ruedas para poder mover la distribución de la habitación según las necesidades.

Esta propuesta es un híbrido entre una cama alta y una litera, siendo una opción muy práctica cuando quieres habilitar la zona inferior de la cama para juegos o estudio. Además, al quedar las dos camas desplazadas, los dos niños pueden verse las caras, lo que favorece la interacción. 

Donde caben dos, caben tres. Y en este caso es bien cierto. Para optimizar al máximo el espacio de esta habitación compartida por tres hermanos, se optó por dos literas colocadas en "L". Y en una de ellas se prescindió de la cama inferior a favor de ganar una zona de juegos. 

Las literas en perpendicular son una opción muy práctica cuando necesitas salvar una ventana, como ocurre aquí, o cuando quieres habilitar la zona inferior de la cama superior para zona de estudio o de juegos. 

Las literas tipo tren son super prácticas porque reúnes en un solo mueble camas, armarios y almacenaje. E incluso puedes contar con una cama extra tipo nido, como aquí. El único "pero" es que al estar las dos camas desplazadas necesitas una pared libre de al menos 300 cm.