Laura Martínez, interiorista: "Estos son mi 11 consejos para separar espacios sin obra y obtener resultados estilosos y muy funcionales"

"Las divisorias de hierro o aluminio con cristal es una de nuestras opciones estrella. ¡Me encantan cómo definen los espacios sin restar luz ni amplitud visual! —apunta Laura Martínez—. Usamos cuarterones de cristal transparente, lo que permite que los espacios se comuniquen de forma muy natural". El Estudio Martínez Elorza ha diseñado este cerramiento acristalado para separar el salón de la cocina.

¿Y por qué tipo de cerramiento apostar? ¿De hierro o aluminio? ¿En blanco o negro? Los cerramientos de aluminio resultan más ligeros visualmente mientras que los de hierro quedan perfectos en ambientes industriales. "Según el estilo del proyecto, solemos optar por marcos blancos, que aportan una sensación más ligera y fresca. Y los elegimos en negro cuando buscamos un look más industrial o elegante. El resultado siempre es muy estiloso y funcional" —nos cuenta Laura. Aquí la interiorista lo ha empleado solo en la parte superior para separar el recibidor de la cocina. Un mueble en blanco y madera con baldas y armario luce perfecto en la entrada.

"Una de mis soluciones favoritas son los listones de madera —nos dice Laura—. Los colocamos de suelo a techo para dividir ambientes sin perder la sensación de amplitud". En este dormitorio en suite, Javier Merediz así lo hizo dando intimidad al baño con una pequeña celosía de madera, lo suficientemente ancha para no ver el baño desde la cama.

"Lo que más me gusta de los listones de madera es que, al no ser una barrera sólida, permiten que la luz fluya entre los espacios y se mantenga esa comunicación visual que tanto nos interesa". En esta imagen, la interiorista Laura Martínez empleó esta opción para separar el recibidor del salón. "Esta solución es muy versátil. En algunos proyectos los hemos utilizado tal cual —continúa Laura— y en otros los hemos complementado con algún detalle extra, como un espejo o estantes flotantes. Esto no sólo añade carácter a la división, sino que también la hace funcional".

"Cuando queremos separar ambientes sin necesidad de obra pero también añadir almacenamiento o un toque decorativo, las estanterías abiertas son una gran opción —sugiere Laura—. Me gusta utilizarlas para crear una división que no sea demasiado rígida, dejando ver parte del otro espacio y permitiendo el paso de luz". En este salón, el Estudio Aquitania diseñó una estantería de madera para separarlo de las escaleras que llevan a los dormitorios. ¡Incluso algunas baldas van apoyadas en parte de los peldaños!

"Dependiendo del proyecto, trabajamos con estanterías de madera para un efecto más cálido y acogedor o de metal y cristal, cuando buscamos un look más moderno y ligero", afirma Laura. En este dormitorio, la interiorista Pia Capdevila ha rematado el tabique con una estantería que lo separa del vestidor. 

"Cuando se necesita flexibilidad, los biombos son una solución sencilla y efectiva —manifiesta Laura—. Son ideales porque se pueden mover según las necesidades del momento, lo que permite reorganizar el espacio de manera rápida. Además, hay tantos diseños disponibles que es fácil encontrar el que mejor encaje con el estilo del proyecto: desde biombos en madera para interiores más clásicos hasta de fibras naturales o metal para ambientes contemporáneos. ¡Las posibilidades son infinitas!". En la imagen, la interiorista Amparo Garrido ha dispuesto un biombo de madera lacado en azul para separar la zona del lavabo del inodoro.

 "A veces no hace falta complicarse demasiado —comenta Laura Martínez—. Un simple mueble bajo, como un sofá en forma de L o una consola, puede ser suficiente para delimitar zonas en un mismo espacio. Esta opción es perfecta para separar una zona de estar del comedor, por ejemplo. Además, podemos darle un plus decorativo colocando un espejo o cuadro en la parte trasera para que la división sea visualmente interesante desde cualquier ángulo". Es lo que ha hecho en este salón la interiorista Sylvia Preslar: la consola negra es el elemento separador entre el salón y el comedor.

Otra idea para separar ambientes sin tener que hacer obra llega de la mano de las alfombras. "Estas no solo protegen el suelo y dan calor sino que son decorativas y amortiguan los ruidos. Puedes elegir el mismo modelo para integrar mejor los espacios o colocar modelos totalmente diferentes y así marcar aún más la división de zonas". En esta imagen, el estudio Antima Homes ha colocado dos alfombras similares de fibra para separar el salón del comedor.

"Otra alternativa que me gusta mucho para separar ambientes sin tener que hacer obra son las cortinas gruesas o paneles textiles. Funcionan genial cuando buscamos una solución temporal o adaptable, ya que se pueden abrir o cerrar, según necesidades. Las usamos muchos en espacios diáfanos o lofts, en los que a veces se necesita un poco más de intimidad sin cerrar completamente el ambiente. Personalmente, me encanta la combinación de telas como el lino en espacios más frescos y luminosos o el terciopelo, si lo que queremos es un ambiente más elegante y acogedor".
El Estudio Lizarriturry Tuneu ha colocado en este dormitorio una sencilla cortina para separar el baño del vestidor.

"Las plantas siempre son una buena opción. No sólo ayudan a separar ambientes, sino que aportan un toque de frescura y naturaleza que mejora cualquier espacio. En algunos proyectos utilizamos macetas grandes para dividir áreas, mientras que en otros instalamos jardines verticales en paneles divisorios. Son soluciones que, además de estéticas, crean un ambiente mucho más relajado y agradable".  El estudio The New Home Concept ha utilizado un arbolito de tamaño medio para separar el salón del comedor ¡y sin necesidad de obras!