"Mi nombre es Yolanda, tengo 45 años y me apasiona la decoración, soy superfan de El Mueble y la compro todos los meses desde hace muchos años, de hecho, me sirve mucho y además me enseña donde comprar mis decoraciones". Así se presenta Yolanda Llobet, una lectora que vive en un piso de 135 m2 con 32 m2 más de terraza en el centro de Barcelona. No fue una de las ganadoras, pero podría haberlo sido. ¿O no?
"Soy empresaria casada y con un hijo de 15 años. A toda la familia nos gusta la decoración, supongo que al final les he inculcado mi pasión. También me encantan las manualidades, por ello os he enviado fotos de mi cuarto de costura", cuenta nuestra fiel lectora.
"El piso tiene 135 m2 de piso una terraza de 32 m2, y dos galerías de 8 m2 y 2 m2 respectivamente. El piso tiene un salón-comedor y cocina abierta, un dormitorio suite con vestidor, otro dormitorio doble (el de mi hijo), otra habitación que utilizamos de despacho, otra habitación que utilizo de costura, y otra habitación que ahora no tiene un uso específico, y 2 baños completos, 2 galerías y una terraza", describe la protagonista del artículo de hoy.
"Esto surge de la unión de 2 pisos. Nosotros vivíamos en el 1º 4ª desde el año 2003 y en 2016 los vecinos de al lado nos dijeron que lo querían vender y nos lanzamos, ya que los pisos se unen por el salón y nos quedaba superamplio. Así que en 2017 hicimos la reforma que nosotros mismos diseñamos, con la ayuda siempre de vuestra revista, que nos sirvió de inspiración", reconoce Yolanda.
El resultado es este amplio piso en el que Yolanda cuida hasta el más mínimo detalle.
En el dormitorio de Yolanda, la pared del cabecero es de papel pintado vegetal, el mismo que podemos ver en el vestidor, lleno de armarios con puertas de espejo.
Este es el cuarto de costura de Yolanda, que sigue con la armonía cromática del resto de la casa. Nos encantan los muebles de madera, que le dan un toque rústico a la estancia.
¡Y qué decir de la terraza! Nuestra lectora tiene diferentes escenarios: una zona con césped artificial, otra con un banco y otra en la que hay una mesa con sillas, para esas cenas de verano al aire libre que tanto apetecen.
Este espacio exterior está repleto de plantas, además de apostar por las fibras y la madera, combinado con el blanco.
¡Una casa espectacular en el centro de una gran ciudad!