"Me llamo Gala, tengo 27 años y esta es mi primera casa. He crecido entre revistas de decoración, la primera y preferida El Mueble, desde que tengo uso de razón, ya que el interiorismo es la pasión y el trabajo de mi madre. Para toda la familia, estar rodeados de un ambiente bonito y armonioso, ha sido una forma de vida inculcada desde pequeñas", cuenta la protagonista de hoy. Ella es Gala Coloma y hace un año decidió independizarse con su novio Santi a un piso que sus padres les cedieron en el barrio de El Retiro, en Madrid.
"La vivienda tenía una reforma de hacía 10/15 años de calidad pero muy pasada de moda. Decidimos arreglarlo manteniendo algunas cosas, para ahorrar costes y cambiar otras para actualizarlo y hacerlo más cómodo", explica nuestra lectora.
"Cuando la obra estuvo terminada, sufriendo mucho porque nos pilló la pandemia y el confinamiento, nos pusimos manos a la obra con la decoración", reconoce Gala.
"En cuanto a los muebles, combinamos sillas medallón con mesa metálica y cristal. Siguiendo las recomendaciones de El Mueble, elegimos un sofá de esquina para que quepan muchos amigos. También tenemos algún mueble recuperado, con la ayuda de mi madre, y un capricho: una chimenea de vapor de agua, regalo de mis hermanas", describe nuestra lectora.
"Haciendo caso a El Mueble, pintamos toda la casa en un blanco roto de Valentine y empapelamos el pasillo para darle personalidad y aligerar el arrimadero de madera oscura. También utilizamos papel en nuestro dormitorio y nuestro baño para hacerlos más acogedores", revela la protagonista de hoy.
"Mantuvimos puertas y tarima, ambas de roble macizo y un arrimadero en el pasillo de madera oscura. Cambiamos la distribución, acercando y abriendo la cocina al salón y redistribuimos los baños para optimizar metros", detalla nuestra lectora. Y añade: "La cocina es vintage en el suelo y sofisticada en su grifo dorado, muy El Mueble".
El pasillo, en el que podemos encontrar el recibidor, es uno de los sitios más llamativos de la casa, con el papel pintado de dibujos de animales, cada uno enmarcado en negro.
El piso tiene dos dormitorios, dos baños y mucha luz. Nos pareció un sitio estupendo para empezar una vida en común, admite.
Me haría feliz formar parte de esta revista que me ha acompañado durante toda la vida y ha acabado siendo imprescindible en el arranque de esta nueva etapa, tan importante para mí", concluye Gala.