¿Buscando un cambio fácil y económico para tu casa? El vinilo es una gran solución para cualquier habitación y puedes ponerlo tú mismo o tú misma. Aunque depende del tipo de suelo vinílico que haya comprado y del tamaño del espacio donde quieres colocarlo, por lo general, este revestimiento puede ser instalado en casa por cualquier persona sin ayuda profesional. ¿Te atreves?
Me presento: soy Juan Forniés, Director Técnico de Gerflor Iberia. ¿Cuál es mi consejo? Los suelos de vinilo que recomiendo para una instalación no profesional son los vinílicos en rollo con tecnología GTF, los de instalación tipo clic y los de instalación autoportante. Como experto en la colocación de suelos de vinilo, te cuento, a continuación, el paso a paso que debes seguir para instalarlos tú misma o tú mismo en casa.
tipos de suelos de vinilo (y cuáles puedes colocar sin ayuda)
Antes de contarte el paso a paso que debes seguir para colocar un suelo de vinilo tú mismo en casa, me gustaría detallarte los diferentes tipos de suelos de vinilo que te vas a encontrar en el mercado. Como he comentado antes, algunos necesitan ser instalados por profesionales y otros no.
Por eso, es importante que sepas qué modelo de vinílico debes comprar para asegurarte de que puedes colocarlo tú mismo:
- Vinílicos en rollo: Estos vinílicos necesitan ser instalados por especialistas porque, aunque llevan adhesivos que se pegan sobre el soldado, su instalación es más compleja y es necesario tener cierta experiencia previa.
- Vinílicos en rollo con tecnología GTF: Este modelo sí que puede ser instalado por no profesionales. Cuenta con un reverso textil que se puede colocar fácilmente sobre un suelo ya existente extendiéndolo a modo de alfombra. Se adapta muy bien a las irregularidades del material anterior.
- Vinílicos autoadhesivos con lamas: Es necesaria la ayuda de un profesional, ya que su colocación es complicada, hay que limpiar muy bien el suelo existente y tapar las juntas con una masilla especial.
- Vinílicos de instalación clic: Este es uno de los más sencillos de colocar y sus lamas se pueden colocar en cualquier tipo de suelo, sin ningún tipo de trabajo previo, salvo que éste tenga unas juntas excesivas, es decir, más de 4mm de ancho y más de 1mm de profundidad. Si se sobrepasan esas dimensiones, recomendamos tapar la junta antes de colocar el vinílico encima.
- Vinílicos de instalación autoportante: Este tipo de suelo vinílico es un híbrido entre los dos modelos anteriores, es decir, ofrece las ventajas del autoadhesivo y las del sistema clic.
Suelo vinílico
paso a paso para colocar un vinílico en rollo
Los vinílicos en rollo con tecnología GTFE llevan un reverso textil que permite que se coloque sin problemas sobre un suelo ya existente (azulejos, terrazo, etc.)
Este reverso textil, que se extiende a modo de alfombra, se adapta a las pequeñas irregularidades del material anterior y el acabado final es excelente. Eso sí, ¡cuidado! Si la habitación en la que se va a instalar mide más de 25m2 aconsejamos siempre poner una cinta de doble cara en todo el perímetro de la estancia.
Mi consejo es que una vez hayas comprado tu suelo de vinilo, para colocarlo tú mismo en casa sigas los siguientes pasos:
- Paso 1: En primer lugar, mide cuidadosamente la estancia donde vas a tu vinílico para asegurarte de comprar la cantidad suficiente de pavimento. A esas medidas añádele un 10% más de lo necesario por si acaso.
- Paso 2: Antes de la instalación, es necesario climatizar el vinilo. Para ello, colócalo en la estancia donde vayas a colocarlo y aplana la caja durante al menos 24 horas.
- Paso 3: Pasadas estas 24 horas, asegúrate de tener a mano todas las herramientas y materiales que necesitas: cúter, tijeras, una cinta métrica, un adhesivo, un mazo de goma, guantes…
- Paso 4: A continuación, debes preparar el suelo anterior antes de la instalación del nuevo. Para ello, límpialo y sécalo bien.
- Paso 5: Empieza la instalación del pavimento por una de las esquinas del espacio.
- Paso 6: Con la ayuda de una llana, ve aplanando el suelo vinílico y eliminando cualquier burbuja de aire que pueda formarse a medida que vas avanzando en la instalación.
- Paso 7: Une las piezas de suelo vinílico con cuidado, evitando dejar huecos o arrugas.
- Paso 8: Por último, remata la instalación del pavimento con un rodapié en el mismo color del suelo o blanco, para dar continuidad visual a la pared.
Cómo mantener un suelo de vinilo
Para terminar, quiero remarcar que, una vez instalado el suelo vinílico, su mantenimiento es rápido y sencillo. En todos los casos, solo será necesario fregarlo de forma habitual con detergentes neutros, no abrasivos, que se encuentran en cualquier supermercado. No es necesario que apliques ceras, ni que lo pulas con el paso del tiempo. Limpiándolo solo con jabón, se mantiene intacto a largo plazo.
¡Ya nos contarás qué tal ha quedado!