Antes y después: de piso de los sesenta a pisito pequeño con muchas ideas para aprovechar de la influencer Paula Seiton, de @paula.unsitioparacadacosa

Aunque la elección del material del suelo del salón no es mala, siempre es mejor apostar por colores más claros en pisos pequeños como este. De esta manera, lograrás más sensación de espacio.

El estilo que eligió la influencer, al ser un piso pequeño y muy luminoso, lo tuvo claro desde el principio: "lo quería en blanco, para darle más luminosidad y de la sensación de más amplitud", confiesa. Para la decoración buscó mucha inspiración en revistas, internet… "Me gustaba la combinación de la madera de roble y ratán con el blanco. Me daban sensación de paz y tranquilidad. Siempre jugando con colores", añade.

El espacio cerrado que ocupaba previamente el salón tenía una puerta roja, que mejor cambiarla, y en la pared, justo antes de entrar, una pared llena de escritos y dedicatorias. Necesitaba urgentemente una capa de pintura.

Nada más entrar en la casa te encuentras un pequeño recibidor que ya nos deja ver que se trata de una gran zona dividida en tres partes: salón, comedor y cocina. En este recibidor encontramos una estantería y un zapatero con complementos en los que dejar las llaves, entre otras cosas.

La casa original tenía la cocina, una salita, que es donde está ahora la parte del salón, 3 habitaciones (2 pequeñas y una grande), y un baño completo. Para hacer un espacio abierto cocina-salón-comedor, eliminó una de las habitaciones, y tiró todas las paredes de la cocina original y la salita, haciendo un espacio abierto de unos 40 m². Paula tenía muy claro también que quería cocina con isla y nevera doble, para romper con lo tradicional.

Cada uno tiene sus hobbies y, a veces, es un poco complicado hacer que se adapten a la vivienda. Por ejemplo, a Paula le gusta mucho tocar el piano y este instrumento no podía faltar en su nueva casa. ¿La solución? Aprovechar una de las paredes del salón para ubicarlo y que se convierta, además, en un complemento decorativo más.

La distribución inicial del piso, al comprarlo, contaba con estancias separadas para salón y comedor. Este cambio era uno de los que tenía más claros Paula Seiton. Además, el color de las paredes no combinaba mucho con el suelo.

Tirar paredes es una de las reformas más de moda, ayuda a ganar espacio y luz, sobre todo en pisos pequeños como el de Paula. Y eso mismo hizo ella con este resultado en el comedor, en el que vemos cómo juega un poco con el color. "El azul menta está presente en mis sillas del comedor, y la vitrina tiene vajilla en esos tonos", describe la influencer.

Como el orden para Paula es muy importante, todo lo que sirva para mantener la casa organizada es vital. Así, aprovecha ambos lados del comedor para tener muebles que le permiten almacenar. A la derecha, alacenas en las que tiene la vajilla; a la izquierda, estanterías con la estructura metalizada negra y cristal.

Como la misma Paula explica, esta casa no había sufrido ninguna reforma previa, por lo que estamos hablando de una cocina hecha en 1965. Claramente está anticuada y desfasada, además de verse oscura.

El punto fuerte de la zona común de la casa está la cocina, que está lacada en blanco y roble natural con una encimera blanca de Silestone. Además, y cumpliendo con uno de los deseos del cliente, se coloca una imponente isla de roble natural.

En la cocina, que se divide en tres partes, una de ellas está destinada al almacenaje. Grandes armarios que van de techo a suelo con los electrodomésticos integrados. "Al tener una nevera de acero inoxidable, jugué en la cocina con una alfombra vinílica en grises y marrones", describe Paula Seiton.

El espacio reservado para la habitación principal necesitaba un lavado de cara completo. El suelo mal acabado, las paredes desgastadas... El cambio en este caso también es muy necesario.

El cambio es significativo. Paula ha apostado por los tonos crudos para que el dormitorio sea acogedor e invite al descanso. Cabecero de madera, un pequeño escritorio en lugar de mesita de noche, una estructura de cama con cajones para almacenar... ¡No falta de nada!

No podían faltar los armarios. En este caso, la experta en orden y limpieza ha elegido armarios de madera con puertas correderas blancas y un espejo al lado de la mesita de noche.

Aprovechar el espacio era un reto para Paula y también lo ha logrado en el dormitorio, en el que a los pies de cama vemos una fina cómoda blanca con 9 cajones que hace a la vez de mesa para el televisor. La decoración en general del dormitorio es escasa, así no se sobrecarga y parece más pequeño de lo que es.

El piso tenía un baño, pero Paula quería dos. Para hacerlos, ganó espacio de una de las habitaciones, la actual de invitados, y dividió el baño original por la mitad. Hizo un baño completo con ducha respetando la entrada del baño original. Y otro baño con lavabo doble y WC dentro de la habitación principal. El lavabo doble dentro de la habitación principal también era algo que le parecía muy funcional. Y al no poder incluir una ducha, tenía que añadirle ese plus.

En la zona de noche, encontramos un pequeño hall-distribuidor, que da acceso a una amplia y luminosa habitación principal con aseo privado de doble lavabo y ventana propia, un baño completo con ventana en altura conectada al aseo (aporta luminosidad y ventilación) y una segunda habitación-vestidor con acceso a uno de los balcones de la casa.

Tampoco se había reformado el baño, que se construyó en 1965. La combinación de suelo y baldosas era muy mejorable, lo que sí tenía ya de base era mucha luz.

Tras ganar ese espacio de la habitación de invitados y dividir el antiguo baño en dos, este es el baño principal que le ha quedado a la experta en orden y limpieza. Este es de estilo más moderno que el que tiene en la habitación principal, con la mezcla del blanco y detalles en negro.

El baño principal es el que tiene la ducha, que le ha quedado amplia y en la que ha apostado por la grifería en negro, muy de moda actualmente. La mampara también con los bordes negros, combinado con el gris de las baldosas.

Paula supo desde un principio que quería un espacio para invitados. Y esta habitación, con el suelo demasiado oscuro, para su gusto, iba a ser la elegida. Pero para ello, necesitaba algún cambio.

Dicho y hecho. El dormitorio de invitados no solo cuenta con una cama y lo necesario para dormir en ella. También tiene un pequeño escritorio.

Convertir este espacio exterior en un lugar bonito y con gusto era otro de los retos de Paula. Y si sigues bajando y viendo el artículo, seguro que coincides con nosotras en que lo ha conseguido.

La elección del césped artificial es un acierto, le da ese toque verde y natural a un espacio exterior que seguro se va a convertir en uno de los lugares preferidos. Y más con los muebles de fibras, que lo hacen acogedor y muy bonito.

Y en el otro lado del balcón, Paula ha instalado una mesa extensible por su se quiere comer fuera, con silla plegable, una estantería –todo de madera–, y plantas, que siempre dan más vida.