Las dimensiones de la cocina pueden determinar cómo será su forma y sus prestaciones, pero no necesariamente su estilo. Por eso, podemos echar a volar la imaginación para convertirla en la cocina de nuestros sueños. En verano, las de estilo rústico cobran protagonismo y nos devuelven el encanto de la madera noble, los colores pastel, las piezas artesanas, los azulejos o suelos hidráulicos y ese ambiente cálido y acogedor donde el tiempo se para y la vida se saborea a fuego lento. Como decimos, los metros cuadrados no deberían ser un impedimento a la hora de reformarla, ya que con un poquito de ingenio y soluciones a medida que aprovechen hasta el último rincón se pueden crear verdaderas cocinas de cuento. A continuación, te mostramos 16 ejemplos que corroboran el encanto de las cocinas 'mini' de estilo rústico.