Los 12 trucos de la revista El Mueble para una casa más acogedora que nunca fallan

Crea una zona de estar confortable, con un sofá 'amable', de formas redondeadas y una mesa de madera. Además, los cojines son unos buenos complementos. 

Tener cojines de diferentes tamaños y formas es muy decorativo y ayuda ajustar la comodidad de la textura. Las mantas pueden estar bien plegadas en los brazos, en cestos o a modo de funda para el sofá. Ponlas bien extendidas solo sobre el asiento y el respaldo.

Las cortinas también pueden acoger la madera mediante los estores de lamas. Los de yute o cañita crearán sombras mágicas al filtrar la luz. Pon lámparas de mimbre, cuerda, yute, paja... Se llevan y quedan muy cálidas. Sino hay chimenea, un grupo de velas naturales imitará su luz. 

En El Mueble nos gusta la gama de los neutros y los tierra: arena, piedra, topo...Y los blancos ricos en matices: marfil, lino...

Puedes destacar una pared, un mueble, un zócalo... y dar calidez a ese rincón especial. Si combinas dos colores, el efecto se potencia. El blanco cálido es acogedor y luminoso. El amarillo dorado con matriz verdoso es ideal. La tonalidad piedra es envolvente y versátil. El color coral es suave y elegante. 

Añade un puf o una butaca que complementen el estar. Puedes atreverte con telas a cuadros, pana o algún estampado. Las paredes pueden 'abrigarse' con papeles con textura que les den protagonismo. "Los papeles efecto entelado son una opción estupenda", apunta Zubizarreta.

Si tienes madera en suelos o techos, tienes la base perfecta. Y si vas a hacer reformas, es la oportunidad de apostar por un parquet que dé calidez, mejor clarito que oscuro. La calidez viene con la armonía, por lo que es importante que el resto de la decoración sea clara.

Las maderas envejecidas o decapadas no pasan de moda. Las piezas con rejilla, enea y fibras naturales (como aparadores, mesillas o sillas) están de máxima tendencia y dan ligereza y textura. También los complementos, como cestos, cajas, bandejas... Un último truco: que la naturaleza entre en casa, con flores, plantas, piñas.

Estos factores son un dúo infalible porque se complementan: la madera da calidez al blanco y el blanco ilumina a la madera. Combínalos en piezas pequeñas y en grandes y acertarás.

La calidez se consigue mezclando telas del mismo tono, con degradados y texturas diferentes. En tu dormitorio, por ejemplo, puedes combinar la colcha de lino con un plaid de lana. El lino nos gusta porque da muchísimo encanto y aspecto vivido.

En el dormitorio, los detalles clave de la calidez son un cabecero tapizado; muchos cojines; una colcha boutí y plaids para crear capas en la cama, unas cortinas que den intimidad, una gran alfombra y lamparitas con pantallas de fibras o de telas. ¡La mezcla perfecta!

Busca telas agradables también al tacto: chenillas, tweed, franela... Las lanas pueden estar en cojines, mantas y alfombras, que agradecerán que su pelo sea más largo. El terciopelo es el más sofisticado.