Hermanos Scott: el gran cambio con antes y después de una casa que necesitaba (mucho) almacenaje. Hicieron una reforma espectacular (incluye vídeo)

Antes de la reforma de los hermanos Scott, el salón de la familia no era para nada acogedor. Los muebles y los textiles carecían de personalidad, y las paredes estaban tan vacías que generaban un aura de tristeza en la estancia.

Tras el paso de Jonathan Scott y Drew Scott, el salón se convirtió en un espacio moderno y actual. El cambio de colores en las paredes, así como su decoración, aportaron mucha luz a la sala. Además, el sofá se acompañó de una butaca en el mismo color, con textiles en tonalidades azules, y la antigua mesa de centro se reemplazó por una moderna mesa con el sobre de mármol. Todo ello, junto al verde de las plantas, logra que el salón sea (al fin) el espacio de reunión familiar soñado.

Otra clave de la reforma del salón consistió en modernizar la chimenea, ya que la original, de ladrillo visto, aportaba mucha oscuridad a la estancia. La chimenea actual está pintada en el mismo color de las paredes, mimetizándose con ellas, pero cuenta con una repisa de madera que la bordea y lleva la atención hasta esta zona.

La cocina contaba con mucha luz natural, pero la distribución podía mejorarse, ya que era poco funcional. Disponía de una barra en forma de U, y la zona del office se encontraba aparte en una isla con la superficie de madera.

Al modificar la distribución, la cocina se volvió mucho más espaciosa. Toda la pared del fondo se aprovechó para instalar armarios tanto en la zona superior como en la inferior, y en el área central de la estancia se colocó una gran isla con fregadero y barra de desayunos con cuatro taburetes de corte clásico. Sobre la isla, además, se colgaron tres lámparas de estilo industrial que generan un contraste muy acertado, en armonía con la gama de blancos y grises. ¡La verdad es que el cambio es espectacular!

Si comparamos la cocina original con la cocina actual, ¡parece que ahora tiene el doble de espacio! Si te fijas, al haber colocado primero la barra y luego el office, la vista se encontraba con obstáculos que empequeñecían la estancia.

Aunque el comedor era amplio, los muebles y la decoración eran serios y daban forma a una estancia sin ninguna personalidad, oscura y aburrida.

La nueva distribución de la cocina permitió construir un rinconcito bajo la ventana, con una barra y una silla, perfecto para teletrabajar o desayunar a solas. Además, ahora los armarios ofrecen todo el almacenaje que la familia precisaba.

A través de un mobiliario de líneas contemporáneas, un blanco reluciente en las paredes, y un mobiliario de almacenaje similar al que encontramos en la cocina, el comedor se ha transformado en una zona que emana luz, estilo y modernidad.

Llegar a casa antes de la reforma de los hermanos Scott, desde luego, no era nada acogedor. La entrada tenía un suelo de baldosas que resultaba frío e impersonal, y la barandilla de la escalera era demasiado oscura. ¡La combinación no funcionaba!

El blanco de las paredes, junto a la madera lavada de la barandilla y los peldaños, así como la tarima que protagoniza el suelo, hacen del recibidor un espacio que invita a entrar y descubrir el resto de las estancias. Por otro lado, se añadieron unas puertas correderas estilo granero para dar paso a la habitación de las bicicletas.

Y al fin llegamos a la habitación donde la familia guardaba sus bicicletas. Como puedes comprobar, se trataba de una sala abarrotada de cosas que no combinaban en absoluto. Una alfombra de pelo pegada a dos lonas, bártulos por el suelo...

Ahora, la habitación de las bicicletas cuenta con un panelado de madera en la pared que la llena de calidez, mientras el almacenaje se solucionó con un mueble bajo en color blanco, y el espacio bajo la ventana se aprovechó para instalar un banco con cojines, ideal para la lectura y el descanso. ¿Qué te ha parecido el cambio?