¿Quién dijo que las flores solo pueden vivir en primavera? El ciclamen de la familia de las primuláceas originaria de la zona oriental del Mediterráneo es una planta con flores de grandes pétalos en forma de mariposa de color rosa, morado, naranja o blanco. En invierno no hay mejor forma de combatir el frío y la falta de luz diurna que añadiendo un poco de color, la alegría y belleza a tu casa con las flores de invierno como esta.
Con sus delicadas flores con vibrantes colores iluminará los días más oscuros de invierno y añadirá un toque de belleza tanto a tu hogar como al jardín. Por ello, te traemos una guía completa para llevar a cabo una buena atención del ciclamen en invierno, desde el riego adecuado hasta la ubicación, la temperatura que necesita para vivir y todos sus cuidados fáciles y sencillos que garantizarán que tu ciclamen se mantenga florecido en su máximo esplendor incluso en los días más gélidos de invierno, ¡toma nota!
¿Cómo se cuida la planta de ciclamen?
El ciclamen es una planta que acapara miradas y será la protagonista allá donde la coloques, pero requiere de ciertos cuidados específicos para prosperar, aunque no son demasiado exigentes, por lo que es una planta ideal para aquellos que no tienen mucha mano para la jardinería, experiencia ni tiempo para dedicar a los cuidados. Algunas de las pautas que necesita el ciclamen para prosperar son:
- Si quieres que tu ciclamen florezca debes evitar regarla en exceso, lo mejor es hacerlo una vez a la semana y por inmersión, es decir, introduciendo la maceta agujereada en un recipiente con agua durante unos 10 minutos. Deja que el agua drene en un plato, pero después retira el exceso de agua. Asegúrate de no mojar ni sus hojas ni sus pétalos.
- Los ciclámenes prefieren temperaturas frescas entre 10-15°C durante el día y un poco más frías por la noche. Evita colocar la planta cerca de fuentes de calor como radiadores o calefacción, ya que el aire seco y caliente puede ser perjudicial para la planta.
- Esta planta prefiere vivir en una humedad relativamente alta, pero es importante evitar que las hojas y flores se mojen, ya que esto puede provocar enfermedades fúngicas. Un truco casero para conservar la humedad podría ser colocar la maceta sobre un plato con guijarros o piedras mojadas.
- Evita corrientes de aire sean frías o calientes y también asegurarte que tu planta vive en un espacio amplio sin que sus flores o hojas choquen con otros objetos, ya que le podría generar estrés e impediría su buen crecimiento.
- Cada dos semanas es conveniente añadir un abono líquido rico en potasio en el riego, para que la planta reciba nutrientes extra. En caso de que observes que sus hojas se vuelven amarillentas, será porque la planta necesita un corrector para sus carencias de hierro. En este caso, procura no excederte con la humedad en el riego.
¿Dónde colocar un ciclamen?
Para que tu ciclamen prospere y florezca deberás ajustar su ubicación si notas signos de estrés o condiciones desfavorables. Coloca el ciclamen en un lugar donde reciba luz indirecta, un buen lugar podría ser cerca de ventanas, aunque se debe evitar la luz solar directa, especialmente durante las horas más intensas del día porque podría quemar las hojas y flores.
¿Cuánto dura una planta de ciclamen?
La esperanza de vida de una planta de ciclamen puede variar según diversos factores, como las condiciones de cultivo o el cuidado recibido. Sin embargo, en condiciones óptimas, un ciclamen puede vivir y florecer durante varias temporadas. Debes saber que el período de floración del ciclamen puede durar de unas pocas semanas a varios meses, dependiendo de la salud de la planta y las condiciones ambientales. Después de la floración, la planta puede entrar en un período en el que las hojas y las flores se marchitan. Durante este tiempo, la planta puede parecer inactiva, pero aún está viva, solo necesita un período de descanso para volver a florecer en la próxima temporada. Como curiosidad, si la cuidas debidamente, ¡puede llegar a medir entre 30 y 40 centímetros!
¿Qué temperatura soporta el ciclamen?
El ciclamen no solo debe cuidarse en invierno, en épocas calurosas debe tenerse en cuenta que las altas temperaturas pueden incidir negativamente en la vida del ciclamen. Esta planta prefiere temperaturas frescas y no tolera bien el calor extremo. La temperatura máxima que puede soportar varía según la variedad, pero es recomendable evitar temperaturas superiores a los 24-25°C.
Las temperaturas calurosas pueden causar estrés en la planta y pueden marchitar las flores y hojas, así como influir en la calidad y duración de la floración. Para proteger el ciclamen del calor excesivo, puedes trasladar tu planta de ciclamen a un lugar más fresco y sombreado, como una habitación con aire acondicionado o un lugar al aire libre con sombra parcial. Proporcionar una ventilación adecuada también puede ayudar a reducir el estrés por calor en la planta.
Cómo conseguir que vuelva a florecer
Si tienes un ciclamen de interior y quieres que vuelva a florecer, es esencial seguir algunos pasos clave. Durante la primavera, las hojas comenzarán a amarillearse, lo que indica que es hora de reducir el riego al mínimo. Coloca la planta en un lugar fresco, seco y a la sombra para que pueda descansar durante el verano.
Si todo va bien, notarás que el ciclamen comienza a crecer nuevamente en septiembre. En ese momento, es hora de devolverlo al interior. Si es necesario, trasplántalo y aumenta la frecuencia de riego. Recuerda que para que el ciclamen florezca, no debe estar expuesto al calor excesivo, así que evita la calefacción. Ubícalo en la zona más fresca de tu hogar, incluso durante el otoño e invierno.
Durante la fase de floración, es importante alimentar la planta con dosis bajas de fertilizante líquido una vez por semana. Además, trasplanta el ciclamen cada dos años para asegurarte de que tenga espacio suficiente para crecer.
Problemas frecuentes que pueden aparecer
Los problemas más comunes que enfrenta el ciclamen de interior suelen ser el exceso de riego o las altas temperaturas. Si observas que las hojas se vuelven amarillas, es probable que la temperatura en la habitación sea demasiado cálida. También puede deberse a un riego inadecuado o a la falta de luz solar. Mantén la planta en una habitación fresca, alejada de la luz solar intensa, y riégala solo cuando la tierra se sienta seca al tacto.
El exceso de riego puede provocar la aparición de moho gris (Botrytis cinerea), que prospera en condiciones húmedas. Además, aumenta la vulnerabilidad de la planta a plagas como la araña roja y el pulgón. Para prevenir estos problemas, es recomendable quitar rápidamente las hojas o flores muertas y evitar que el agua salpique sobre las hojas.
¡Cuidado! Es tóxico...
Es crucial tener en cuenta que los ciclámenes son plantas venenosas, tanto en el jardín como en interiores. Si se consumen hojas o tubérculos, pueden provocar molestias gastrointestinales, como náuseas, vómitos o diarrea, y en mayores cantidades, pueden causar mareos y síntomas de parálisis. Si hay una ingesta accidental por parte de niños o mascotas, es fundamental consultar a un veterinario o médico de inmediato.
Variedades de la planta de ciclamen para exterior
Existen 23 especies del grupo Cyclamen, pero estas 4 que hemos seleccionado son las más habituales como planta de decoración sobretodo para exteriores:
- Cyclamen hederifolium: Es una de las plantas de esta especie más resistente a las heladas y puede prosperar en climas más fríos. Sus hojas son en forma de corazón y tienen un patrón de marmoleado en verde y plateado. Produce flores de color rosa o blanco en otoño.
- Cyclamen coum: Es resistente y se adapta bien a los jardines de invierno. Tiene hojas pequeñas y redondeadas y flores en tonos de rosa y púrpura que despuntan durante el invierno y la primavera.
- Cyclamen purpurascens: Sus flores pueden ser de rosa, púrpura o blanco, y sus hojas son usualmente de un verde oscuro con marcas plateadas.
- Cyclamen persicum: Esta planta suele cultivarse en interior. Sin embargo, en climas suaves también puede crecer al aire libre. Sus flores pueden variar entre una amplia gama de colores.
Significado de la planta de ciclamen
Regalar una planta con flores el ciclamen simboliza el amor maternal y la sinceridad, este regalo implica el amor y ternura sinceros de los seres queridos. En Grecia el ciclamen es la flor nacional y en Japón es la flor sagrada del amor. Por ello, esta planta se relaciona con el amor profundo, sincero y tierno.
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