Plantas con poca raíz que nunca tendrás que trasplantar

Es una de esas plantas que están de moda ahora mismo gracias a las redes sociales. Lo cierto es que la cadena de corazones es de lo más llamativa gracias a su porte colgante que puede incluso llegar a medir entre 2 y 4 metros.

Aunque no te lo creas es una planta suculenta así que nos vendrá genial si no queremos complicarnos con trasplantes porque crece muy despacio. Esta planta de interior requiere de mucha luz y poca agua, es resistente y fácil de cuidar. 

Las alocasias son unas plantas hipnóticas, parecen sacadas de una película de ciencia ficción. Hay variedades que destacan por tener unas hojas enormes, pero no la variedad polly.

Se trata de una variedad enana de la oreja de elefante que no supera los 25 cm de altura (la clásica alcanza el metro y medio también en interior). Es una planta que requiere de mucha luz y mucha humedad ambiental.

Los cactus son una apuesta segura para interiores cálidos, secos y muy bien iluminados. Son de esas plantas que puedes tener y olvidarte de ellas porque los riegos son muy poco frecuentes.

Para los que tienen poco sitio y no quieren mover macetas son ideales las variedades más pequeñas, como el falso peyote o los cactus injertados, aunque hay montones de especies interesantes. Descubre cómo cuidar cactus, crasas y suculentas.

Si cuentas con mucha luz y poco sitio en casa otra buena opción son las suculentas. De todas ellas la echeveria, o rosa de alabastro, es una apuesta segura.

No tendrás que trasplantar la echeveria si le vas quitando los hijuelos que crecen a su alrededor. Si los plantas en otras macetas podrás propagarla sin mucho esfuerzo manteniendo la original.