Por mucho que te empeñes en posponer la hora de la limpieza, tenemos una mala noticia que darte: nunca podrás librarte de ella. Si lo haces porque piensas que limpiar la casa a fondo es una tarea pesada y aburrida, échale una ojeada a estos plannings de limpieza para personas perezosas o haters de la limpieza. Ahora bien, si la excusa es que no tienes tiempo para hacerlo... ¡Se acabó! Con estos trucos para limpiar la casa a toda velocidad conseguirás un hogar reluciente en tan solo unos minutos. ¿Empezamos?
1. Plántale cara al polvo
Si intentas ocultar la suciedad de tu casa, ¡el polvo es tu peor enemigo! Te delatará rápidamente, por lo que intenta quitarlo a menudo. Es rapidísimo. Compra trapos atrapa polvo o pasa el plumero por los muebles y después barre o aspira para quitar los restos del suelo. ¡No te llevará más de 5 minutos!
2. Mantén el orden visual en el salón
El orden da sensación de limpieza. Por lo que evita SIEMPRE tenerlo todo por en medio en el salón. ¿El truco? Mantener los objetos ordenados sobre la mesa, en las estanterías o en el sofá (cojines, plais...). Así solo tendrás que preocuparte de quitar el polvo o limpiar el suelo y las ventanas cuando sea necesario.
3. limpia al momento los utensilios de La cocina
Olvídate del caos en la cocina y planifícate mejor cuando estés en ella. ¿El truco? Friega los utensilios que vayas utilizando al momento. De esta manera evitarás que se acumulen y solo tendrás que fregar los platos de después de comer y pasar un trapo por la encimera. Para ir más rápida, puedes limpiar la vajilla sucia por grupos. Es decir, agrúpalos por cubiertos, platos, vasos ¡y ponte al lío!
4. ¡sácale brillo al baño!
¿El truco para que el baño se vea limpio más tiempo? Frotar la grifería. Si brillan los grifos del lavabo, el bidé o la ducha conseguirás una mayor sensación de limpieza. Para un acabado impoluto, puedes frotar el grifo con un poco de zumo de limón. Y si quieres otro plus de limpieza, igual de rápido y sencillo, repasa a diario las marcas del espejo.
5. Los suelos, siempre impecables
Intenta mantener el suelo del baño y la cocina, ¡siempre impecable! Repásalo a diario con la escoba y lo más importante: limpia cualquier líquido que se derrame al momento. Así evitarás que se creen manchas que transmiten sensación de suciedad o tener que frotar con fuerza para eliminarlos.
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