10 usos del jabón de Castilla que no conocías y te van a encantar

En esta época en la que lavarse las manos resulta vital para mantenernos sanos, muchas personas han comenzado a buscar tutoriales sobre cómo hacer jabón casero, como una clara apuesta por lo natural. Y entre todas las opciones, el jabón de Castilla es uno de los favoritos. Si no sabes de qué hablamos, ¡sigue leyendo!

¿Qué es el jabón de Castilla?

Se dice que el jabón de Castilla surgió, como su propio nombre indica, en el Reino de Castilla. Elaborado con aceite de oliva puro, agua y sosa, este jabón que apenas hacía espuma por su composición, pronto ganó adeptos entre las familias reales de toda Europa, ya que gozaba de múltiples beneficios para la salud.

Para empezar, además de limpiar en profundidad, el jabón de Castilla nutre y protege hasta las pieles más sensibles. No solo eso, también contribuye a una rápida cicatrización de las heridas, y es que el aceite de oliva es un potente regenerador.

Por si esto fuera poco, la oleuropeína presente en las hojas de olivo y en la pulpa de las aceitunas verdes tiene propiedades antibacterianas. ¿No te parecen suficientes motivos para probar el jabón de Castilla?

Jabón de Castilla en barra

La forma tradicional del jabón de Castilla es en barra. En la actualidad, para hacer más espuma, es habitual que las marcas añadan otros aceites vegetales como el de coco a la fórmula, o aceites esenciales que aportan un aroma agradable. No obstante, también se puede encontrar en su versión 100% pura, sin olor y sin espuma.

Jabón de Castilla Líquido

Si no eres muy fan de los jabones en barra, también es posible encontrarlos en su versión líquida. La única diferencia es que estos últimos se elaboran con hidróxido de potasio, en lugar del hidróxido de sodio que se utiliza en los jabones en forma de barra.

Dr. Bronners es, probablemente, la marca que comercializa jabones de Castilla más famosa en la actualidad. Elaborados con aceite orgánico, los jabones están disponibles en un montón de aromas diferentes. El que te mostramos en la imagen está perfumado con aceite de hierbabuena, para una piel fresca y una nariz despejada. El precio: 23,84 €.

10 usos del jabón de Castilla

Si te han entrado unas ganas irrefrenables de probar el jabón de Castilla, no te pierdas ni uno de los 10 usos (más allá de lavar las manos) que te mostramos a continuación.

1. Gel de ducha: El jabón de Castilla es perfecto para el cuerpo. Su pH suave no te resecará la piel, al contrario, la nutrirá igual que hace con las manos.
2. Champú para el pelo: Sin sulfatos ni parabenos, el jabón de Castilla también protegerá tu pelo del daño ocasionado por los productos químicos.
3. Para bañar a tu perro: Alucinante, ¿verdad? De la misma forma que es saludable para los humanos, también es respetuoso con la piel de los perros.
4. Para lavar los platos: ¿Se te ocurre mejor jabón lavaplatos que uno que protege y nutre tus manos mientras deja tu vajilla como nueva?
5. En el afeitado: En la cara, se recomienda utilizar 10 gotas de jabón de Castilla para hacer espuma antes del afeitado; en las axilas, 3 gotas; y en las piernas, media cucharada. Culmina con tu hidratante favorita... ¡y listo!
6. Detergente para la ropa: Si quieres librarte de los químicos en el lavado de tu ropa, añade media taza de jabón de Castilla en cargas grandes (en cargas pequeñas usa la mitad), y media taza de vinagre en el ciclo de enjuage.
7. Limpiador de hogar multiusos: Solo tienes que coger un bote en spray, llenarlo de agua tibia y añadir unas gotitas de jabón de Castilla.
8. Desmaquillante: Mezcla a partes iguales jabón de Castilla, agua de hamamelis y aceite de coco. ¡Alucinarás con lo limpia y resplandeciente que queda tu piel sin residuos de maquillaje! Y ahorrarás mucho dinero en productos.
9. Para limpiar tus brochas de maquillaje: ¿Buscando una solución natural para limpiar tus brochas? Utiliza unas gotas de jabón de Castilla y agua tibia para eliminar la suciedad, y no te olvides de terminar el proceso con agua fría.
10. Alivia cualquier congestión: Si tienes problemas de sinusitis o, simplemente, estás congestionada, pon agua a hervir y vierte una cucharada de jabón de Castilla. A continuación, respira el vapor que emana de la olla. ¡Verás qué alivio!