Las estaciones del año se diferencian unas de otras, principalmente, porque cada una de ellas tiene su propia climatología. Estas diferencias de temperaturas y de climas hacen que, cada vez que estrenamos nueva temporada, tengamos que hacer cambios en nuestras prendas de vestir y en nuestro hogar.
Muchas personas aprovechan estos inicios de temporada para, además de hacer el correspondiente cambio de armario, limpiar la casa a fondo. Ya completamente inmersos en el otoño, queremos contarte qué 10 cosas tienes que limpiar sí o sí en la temporada otoñal para tener tu hogar preparado para el frío, las primeras lluvias y la caída de las hojas.
1. Patios, entradas y caminos
Durante el verano, las superficies exteriores acumulan suciedad debido al tiempo que pasamos al aire libre, cocinando o en el jardín. Antes de que llegue el invierno, es recomendable limpiar estas áreas con agua a presión para eliminar estas suciedades.
2. Ventanas
Además de en primavera, las ventanas también deben limpiarse en otoño para evitar que el polvo y la suciedad se acumulen en los cristales y mosquiteras. Es aconsejable no dejar este polvo mucho tiempo en las ventanas para evitar el deterioro de los cristales. Y recuerda también: cuanto más limpias estén las ventanas, más luz te entrará en casa.
Para una limpieza eficaz y natural de los cristales, puedes preparar una mezcla casera con ingredientes que seguramente ya tienes en casa. Solo necesitas mezclar 500 ml de agua tibia, 250 ml de vinagre blanco y una cucharadita de jabón líquido suave. Vierte esta solución en un pulverizador, agítalo bien y rocía sobre las ventanas.
Luego, utiliza una esponja o paño de microfibra para extender la mezcla, y seca con un paño limpio para evitar marcas. El vinagre desinfecta y elimina la grasa, mientras que el jabón ayuda a despegar la suciedad más difícil.
3. Canalones
Tampoco puedes olvidarte de los conductos de los bordes de los techos, los cuales deben limpiarse dos veces al año, en primavera y en otoño. Y es que es crucial limpiar los canalones durante los meses otoñales, ya que las hojas y las ramas de los árboles que se caen en esta época, podrían obstruirlos y causar filtraciones y daños en el techo.
4. muebles de exteriores
Durante el verano, los muebles de los exteriores de la casa acumulan suciedad, manchas y moho por su uso frecuente y la exposición a los rayos del sol. Para prolongar su vida útil, deben limpiarse en otoño. También es importante tener en cuenta el tipo de muebles que son, muchos de ellos podrían necesitar ser almacenados durante el invierno, como los de madera o fibras naturales.
Para dejar tus muebles de exterior impecables y listos para el invierno, puedes preparar una mezcla casera muy efectiva. En un balde, combina un litro de agua tibia, media taza de vinagre blanco y una cucharada de bicarbonato de sodio. Esta mezcla es ideal para eliminar manchas y prevenir el moho.
Aplica la solución con una esponja o cepillo suave, frota las áreas con más suciedad, y enjuaga bien con agua limpia. Luego, asegúrate de secar por completo cada pieza, especialmente si son de madera o fibras naturales, ya que podrían dañarse si permanecen húmedas.
5. Chimenea
Limpiar la chimenea antes de la temporada de frío es esencial por motivos de seguridad, ya que ayuda a reducir el riesgo de incendios. Además, una chimenea limpia permite una mejor combustión y circulación de aire, lo que también ahorra dinero.
La forma más efectiva de limpiar una chimenea es comenzar por retirar las cenizas acumuladas. Usa una pala y un cubo para deshacerte de los restos, y luego aspira el polvo residual con una aspiradora adecuada para cenizas. A continuación, prepara una mezcla de agua caliente y vinagre blanco para limpiar el hollín de las paredes internas.
Para ello, utiliza un cepillo rígido, idealmente de cerdas de acero o nailon, y frota con movimientos firmes para eliminar los depósitos de creosota que se hayan acumulado. Si es posible, revisa también el tiro y el conducto de la chimenea para asegurarte de que estén libres de obstrucciones. Y recuerda: una limpieza profesional al menos una vez al año es fundamental para asegurar el buen funcionamiento y la seguridad de la chimenea durante todo el invierno
6. Armarios
Si no tienes espacio para toda la ropa de temporada en tu armario, el otoño es un buen momento para hacer sitio. Maximiza el espacio donando o desechando ropa que no hayas usado en mucho tiempo.
Para optimizar el espacio en tu armario este otoño, aprovecha el almacenamiento vertical al estilo Marie Kondo. Guarda la ropa de temporada pasada en cajas que puedas apilar en estantes superiores, y organiza la ropa doblada en formato vertical dentro de los cajones; esto te permitirá ver todo de un vistazo sin desordenar.
7. Jardín
El jardín también necesita atención en otoño. Elimina malas hierbas y recorta árboles y arbustos. Además, prepara tu césped para el otoño y el invierno aireándolo, rellenando zonas sin césped y fertilizando tus plantas.
Para dejar tu jardín listo para el otoño, empieza eliminando las malas hierbas y recortando árboles y arbustos para mantenerlos sanos y evitar que se extiendan demasiado. Airear el césped también es clave: puedes hacerlo perforando el suelo con una horca para mejorar la absorción de agua y nutrientes.
Rellena las zonas sin césped con semillas de crecimiento rápido y, finalmente, aplica un fertilizante de liberación lenta. Esto fortalecerá las raíces y permitirá que tus plantas y césped soporten mejor las bajas temperaturas del invierno.
8. Polvo
Al bajar las temperaturas, pasarás más tiempo en casa, por lo que es importante limpiar bien las superficies que acumulan polvo. Por eso, además de quitar el polvo con regularidad, también debes aprovechar la llegada del otoño para dedicar un día entero a limpiar el polvo de toda la casa en profundidad.
Para limpiar el polvo a fondo y de forma sencilla, empieza por las zonas altas, como estantes y muebles, y ve descendiendo, de modo que el polvo caiga al suelo y puedas aspirarlo al final. Usa paños de microfibra ligeramente humedecidos para atrapar mejor el polvo sin dispersarlo.
No olvides las áreas olvidadas, como las persianas, los rodapiés y las aspas de los ventiladores. Para una limpieza más duradera, considera aplicar productos antiestáticos en superficies como mesas o estanterías; esto ayuda a repeler el polvo y a espaciar las limpiezas profundas.
9. Lámparas y luces
La iluminación es esencial en cualquier hogar, especialmente en los meses fríos, cuando los días son más cortos. Dedica tiempo a limpiar todas las lámparas y cambiar bombillas cuando sea necesario.
Para maximizar la iluminación en los meses más oscuros, limpia a fondo todas las lámparas, ya que el polvo acumulado puede reducir considerablemente su brillo. Usa un paño suave o de microfibra ligeramente humedecido para limpiar pantallas, bombillas y partes metálicas.
Además, revisa y cambia las bombillas si es necesario, optando por luz cálida para crear un ambiente acogedor en invierno. Si tienes lámparas con tonos claros o superficies reflectantes, limpiar regularmente potenciará la luminosidad en toda la habitación.