Cómo ordenar el cajón de la ropa interior

Como dice la gurú del orden Marie Kondo, “la organización efectiva implica dos acciones esenciales: eliminar cosas y decidir dónde guardarlas. De estas dos, la eliminación va primero”. Así que el primer paso para que tu cajón de la ropa interior sea tu mayor orgullo de organizadora es vaciarlo. Separa en montones cada tipo de prenda: las braguitas por un lado, los tangas por otro, la lencería fina, los sujetadores… Analiza toda la ropa interior que tienes y valora si hay que retirar algo, aprovecha para organizar esta zona del armario. Tal vez un sujetador al que se le sale el aro o te aprieta demasiado o una braguita dada de sí que ya no utilizas.

Analiza qué tipo de ropa interior utilizas a diario. Si, por ejemplo, haces ejercicio regularmente, reserva un lugar para guardar las braguitas y sujetadores deportivos y así, cuando vayas a usarlos, los localices fácilmente. Lo mismo si tienes bodys, ligas o lencería fina que utilizas esporádicamente.

Destina un lugar para estas prendas en el que estén protegidas y bien guardadas. ¡Sería una faena que el enganche de un sujetador estropeara ese conjunto tan bonito de lencería! Guarda la ropa interior más especial en una caja dentro del armario, en un lugar donde no estorbe pero accesible.

Métodos para organizar la ropa interior

Existen varios métodos para doblar tu ropa interior, y este dependerá de dónde la vayas a guardar. Si va en un cajón, dobla cada una de las prendas como nos ha enseñado Marie Kondo. Coloca las braguitas y tangas –también brasileñas y culotes– boca abajo y lleva la parte de la entrepierna hasta la cintura. Después dobla cada uno de los lados hacia el centro sobre la parte de la entrepierna. Después, enrolla la braguita de abajo hacia arriba. Así lo que se verá será la parte delantera de la braguita o tanga.

Para ordenar la ropa interior según el método Konmari, guárdala en un pequeño cajón de la cómoda o del armario. Coloca cada una de las braguitas en vertical, de manera que, cuando abras el cajón, puedas verlas todas sin necesidad de andar rebuscando y desordenándolo aún más.

Uno con una profundidad de 10 cm será suficiente para colocar todas tus braguitas y tangas o los calzoncillos. Emplea organizadores de ropa interior, bien sea con compartimentos individuales o más grandes, para que la guardes según categorías: las braguitas, los tangas, los sujetadores…

Hay también organizadores de tela que van colgados de una percha. Este método es genial si no tienes demasiado espacio en los cajones. ¡Además podrás ver toda tu ropa interior fácilmente! Al ir colgada de una percha ocupa muy poco sitio. Cuélgalo detrás de la puerta de la habitación o dentro del armario.

Cómo ordenar los sujetadores

Este tipo de prendas tienden a deformarse y darse de sí con el tiempo, y más si no se guardan y lavan adecuadamente. Seguramente, si abres tu cajón de la ropa interior, los sujetadores están doblados sobre sí mismos, con una de las copas del revés y tirantes y broche escondidos en las copas. Pero así se deforman y estropean.

Para que esto no pase, Marie Kondo –al igual que la mayoría de organizadores profesionales– recomienda guardar los sujetadores en paralelo, uno seguido de otro. Esconde los tirantes y el broche en el interior de las copas y, ya sean con aro, armados o de palabra de honor, podrás localizar el que quieres rápidamente y de un solo vistazo.

Puedes separarlos del resto de tu ropa interior con una caja en la que tenerlos ordenados y que no se desparramen, lo que puede pasar si los tienes sueltos en el cajón. Hay organizadores para sujetadores en los que guardar cada prenda en compartimentos diferentes para que no se deformen ni enganchen los unos con los otros. ¡Qué gusto abrir los cajones y disfrutar de su orden!

¿Y si me voy de viaje?

Es habitual, cuando nos vamos de vacaciones, llevar ropa interior para tantos días como vamos a estar fuera –¡lavadoras en vacaciones no, gracias!–. Pero también es habitual que, al tercer día, seas incapaz de encontrar una braguita limpia o un sujetador sin sacar todo de la maleta. ¡No desesperes! Hay prácticos “y muy bonitos) organizadores de viaje para tu ropa interior. Guarda braguitas y sujetadores en los distintos compartimentos utilizando el mismo método que en tus cajones: encontrarás todo a la primera y no se deformará ni una prenda.