La crisis del coronavirus nos ha hecho conscientes de la cantidad de virus y bacterias con las que convivimos y lo sencilla que es su propagación. Las visitas en casa ya se permiten, por lo que es probable que te hayas preguntado cómo se desinfecta el sofá después de recibir a tus amigos o familia en casa. Su limpieza es bastante similar a la que realizas siempre, pero con unas recomendaciones extra.
Cómo desinfectar un sofá de tela o microfibra
Antes de aplicar ningún tipo de producto, comprueba de qué tejido es la tapicería de tu sofá. Dependiendo de con qué esté confeccionado, su limpieza es diferente. Este método sirve para sofás de tela y de microfibra.
- Paso 1. Aspira bien todo el sofá, desde la parte posterior a donde van apoyados los cojines de los asientos, los reposabrazos y los respaldos. Para hacerlo correctamente, lo ideal es utilizar el cabezal para tapicerías –el que tiene una tela aterciopelada roja– y, después, emplear un cepillo suave para eliminar los pelos o pelusas que puedan quedar. Este paso deberías hacerlo, al menos, una vez a la semana e incorporarlo a tu rutina de limpieza.
- Paso 2. Quita todos los elementos que puedas del sofá: las fundas de los cojines, las de los asientos y reposabrazos –si se puede–. No sacudas los elementos: pequeñas partículas de polvo saldrán volando y se posarán en otras superficies. Lo mejor, es aspirarlos como te hemos explicado en el paso previo, especialmente si tienes mascotas.
- Paso 3. Lava las fundas de los cojines y de todos los elementos desenfundables del sofá. Si están muy sucios es recomendable dejarlos en remojo al menos una hora con jabón neutro. Comprueba la etiqueta para saber a qué temperatura las puedes lavar, pero lo habitual es hacerlo a un máximo de 40º (para que no encojan y se deformen).
- Paso 4. Coloca las fundas al aire libre y a la sombra para que se sequen.
- Paso 5. Para el resto del sofá –y aquellos que no se pueden quitar las fundas– tienes varias opciones. Eso sí, antes de aplicar alguna de ellas sobre la tapicería, haz una prueba en una zona no visible del sofá para comprobar que no se estropea.
- Con alcohol. Rocíalo sobre la superficie, pasa un cepillo suave y un trapo limpio, mejor de microfibra o de algodón.
- Con alcohol, limón y detergente. Tienes que mezclar medio vaso de alcohol, con medio de limón y una cucharadita de detergente. Pulverízalo sobre la tapicería y retira la suciedad con un trapo.
- Con agua tibia, zumo de limón y bicarbonato. En dos litros de agua tibia, añade el zumo de un limón y dos cucharadas de bicarbonato –hay mogollón de cosas que puedes limpiar con bicarbonato–. Humedece un paño de microfibra y pásalo por todo el sofá. Después pasa un trapo limpio.
- Con agua tibia, vinagre y bicarbonato. En un litro de agua tibia, echa un vaso de vinagre y una cucharadita de bicarbonato. Pasa todo el sofá con un paño humedecido en la solución y haz especial énfasis en las manchas más persistentes.
- Con la vaporeta. La limpieza con vapor es el mejor método para no utilizar ningún producto químico, ya que las altas temperaturas desinfectan los tejidos. Además, sirve también para eliminar los ácaros y los malos olores.
- Paso 6. Sea cual sea el método que emplees, deja que el sofá se seque bien antes de sentaros en él y de volver a poner los cojines.
Cómo desinfectar un sofá de piel
- Paso 1. Al igual que con el sofá de tela o microfibra, lo primero que debes hacer es aspirarlo bien con el cabezal para tapicerías.
- Paso 2. Haz una mezcla de agua destilada y jabón neutro. Con un paño humedecido con esta mezcla, frota con delicadeza el sofá haciendo movimientos circulares. Con una toalla o trapo enjuagado en agua fría, retira la suciedad.
- Paso 3. Seca el mueble con un paño limpio y seco.