La recomendación general para secar la ropa y asegurarnos de que las prendas no encogen ni se desgastan es tenderlas en exteriores, ya que el secado natural reduce el uso de energía y conserva mejor los tejidos. Pero, ¿sabías que existen algunos textiles que no deben secarse al aire libre? Algunos materiales, al exponerse a la humedad ambiental o al peso del agua, pueden deformarse o deteriorarse con más facilidad.
Para preservar el estado de tu ropa y que esta luzca como nueva durante más tiempo, te contamos, a continuación, cuáles son los 6 tipos de prendas que nunca deberías secar al aire libre y qué alternativa usar para cada caso específico.
Con estos consejos, podrás prolongar la vida útil de tus textiles y mantenerlos en perfectas condiciones.
1. Jerséis gruesos
Los jerséis gruesos se vuelven muy pesados al mojarse, sobre todo si se lavan en un ciclo delicado. Colgarlos en el tendedero puede hacer que se estiren y pierdan su forma. Para evitar esto, puedes enrollar el jersey en una toalla limpia y apretar suavemente para quitar el exceso de agua. Después, en lugar de tenderlo, colócalo sobre una superficie de secado que sea plana.
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2. mantas de punto
Secar al aire libre una manta de punto puede estirar y deformar el hilo. Además, estas mantas retienen mucha agua, lo que alarga el secado.
Por eso, lo ideal sería secar las mantas grandes o pesadas en la secadora, siguiendo las instrucciones de su etiqueta. Para tejidos más delicados, como mantas de ganchillo, colócalas planas o sécalas en la secadora a baja temperatura.
3. Fundas de cojines
En cuanto a las fundas de cojines, estas deben colocarse sobre el relleno mientras aún están húmedas porque, si se secan antes de colocarlas, luego no encajarán bien.
Lo recomendable es estirar su tejido húmedo sobre el cojín para revertir el encogimiento y cerrar las cremalleras. Para el secado final, coloca los cojines en un lugar con buena circulación de aire.
4. Prendas con relleno de plumas
Tampoco está recomendado secar al aire libre prendas o textiles que contengan relleno de plumas como abrigos, chalecos o edredones. Lo ideal es secarlas en la secadora a alta temperatura y añadir tres o cuatro pelotas de secado para ayudarlas a recuperar su volumen y secar el relleno por completo.
5. prendas denim
Aunque muchas veces es recomendable secar las prendas denim (como vaqueros o chaquetas) al aire libre para preservar el color, este tejido puede quedar áspero o rígido debido a su alto contenido de algodón.
En su lugar, sécalo en la secadora a baja temperatura, siempre revisando la etiqueta para evitar que se encoja.
6. Alfombrillas del cuarto de baño
Aunque secarlas al aire libre no las dañará, es mucho mejor secar las alfombrillas del cuarto de baño en la secadora ya que, como se lavan con frecuencia debido a su uso diario y a su contacto directo con el agua, tardarán menos tiempo en estar secas. Además, si las alfombras del baño se secan al aire libre, podrían quedar apelmazadas o aplastarse. Eso sí, también es importante que revises en su etiqueta las recomendaciones de temperatura de secado.