En España somos gente de tradiciones y le damos un valor incalculable a la sabiduría de nuestras madres y abuelas. Por este motivo, hoy en día todavía utilizamos en nuestros hogares trucos de limpieza que se han ido heredando en nuestras familias de generación en generación. Nosotras los hemos aprendido de nuestras madres, ellas de nuestras abuelas, ellas de nuestras bisabuelas y así hasta tiempos inmemorables.
Lo mejor de todo es que son trucos de limpieza muy económicos porque se realizan con ingredientes que ya tenemos por casa, no hace falta comprar un limpiador costoso de supermercado. Trucos de limpieza de la casa de madres y abuelas hay muchísimos, pero nos vamos a centrar en los específicos para quitar manchas difíciles. ¿Te suena alguno? ¿Los haces en casa?
Por cierto, hazte con este ebook gratis “100 trucos fáciles de orden” para tener tu casa siempre a punto con los mejores consejos.
1. Leche para las manchas de tinta
El bolígrafo y la tinta en la ropa pueden parecer una catástrofe, pero hay una solución casera muy española: la leche. El éxito de la leche para quitar manchas de tinta se lo debe a su contenido en proteínas y grasas, las cuales ayudan a disolver los pigmentos de la tinta. Para ello, deberás sumergir la prenda con la mancha de tinta en un recipiente con leche tibia (casi caliente) y dejarla en remojo al menos dos horas. Si no se ha quitado directamente con el remojo, no te preocupes, cuando la laves en la lavadora con detergente y agua caliente terminará de desaparecer.

Usar leche para quitar manchas de tinta en la ropa es un truco muy español
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2. Patata para manchas en alfombras
Si tu alfombra ha sufrido un percance con café o vino, prueba con una patata cruda. Aunque parezca una locura, las abuelas españolas no se equivocan nunca y el almidón de la patata eliminará la mancha rápidamente gracias a su almidón. Para ello, corta una patata en dos y frótala directamente sobre la mancha. Después, termina de limpiar con un paño húmedo y un poco de jabón neutro.
3. Zumo de limón para manchas de óxido
Si tu ropa blanca tiene manchas de óxido, el limón, la sal y el sol son la combinación perfecta para decirles adiós para siempre. Para ello, corta un limón y exprímelo con las manos directamente sobre la mancha. Después, espolvorea sal y cuelga la prenda al sol durante unas horas. Por último, lávala en la lavadora en tu lavado habitual.
4. Sal y agua con gas para las manchas de vino tinto
El vino tinto es parte de nuestra cultura, pero cuando cae sobre la ropa o el mantel, el drama está servido. Para eliminarlo rápidamente, el truco más español de toda la vida consiste en espolvorear sal sobre la mancha fresca y dejar que absorba el líquido. Después, frota con agua con gas (también sirve gaseosa) y lava la prenda con normalidad.

La sal y el agua con gas quitan las manchas de vino tinto en un santiamén
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5. Bicarbonato y vinagre para manchas de grasa
Tanto el bicarbonato de sodio como el vinagre blanco tienen propiedades químicas que facilitan la eliminación de grasa. Este truco es tan fácil de aplicar como espolvorear bicarbonato de sodio directamente sobre la mancha para que se encargue de absorber el exceso de grasa. Después, aplica un chorro de vinagre blanco y frota con un cepillo. Por último, lava la prenda con agua caliente y jabón.
6. Aceite de oliva para manchas de pegatinas
Por si no lo sabías, el aceite es un disolvente natural de adhesivos. El truco español para eliminar las pegatinas que se quedan pegadas en muebles y cristales consiste en aplicar unas gotas de aceite sobre la misma y dejar actuar unos minutos. En este tiempo, la pegatina se ablandaría y ya podrías retirarla usando una espátula de plástico o una tarjeta vieja. Para terminar, limpia la superficie donde ha estado pegada con agua y jabón.
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