Si convives con uno o varios gatos, seguro que cuando llega el momento de planificar tus vacaciones te sientes un poco culpable pensando en lo tristes que se quedarán. Descuida, es algo normal, y le pasa a todas las personas que tienen mascota. Al fin y al cabo, son como un miembro más de la familia.

Sin embargo, nuestro descanso también es sagrado, y no podemos dejar de disfrutar nuestras vacaciones por nuestras mascotas. Bien es cierto que cada vez hay más hoteles pet friendly, pero viajar con gatos y perros sigue suponiendo un desafío en muchos casos, así que lo único que podemos hacer es buscar las mejores técnicas para reducir su estrés y ansiedad durante nuestra ausencia, y asegurarnos de que estarán perfectamente atendidos.

¿No sabes por dónde empezar? Pues a continuación encontrarás las 8 técnicas para reducir el estrés de los gatos que siempre funcionan.

 

1. Preparar su entorno

Antes de irte de vacaciones, es importante asegurarte de que el entorno de tu gato sea lo más familiar y cómodo posible para él. Intenta mantener su espacio limpio y organizado, con todas sus cosas en su lugar habitual: su cama, juguetes, rascadores y, por supuesto, su caja de arena. También es recomendable evitar hacer cambios significativos en su entorno antes de marcharte de viaje, ya que esto puede generarle un estrés adicional.

Gato y rascador

Cuidar el entorno de tu gato es esencial para su bienestar.

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2. Mantener una rutina

Los gatos, como los perros, son animales de rutina, y eso significa que cualquier cambio puede afectarlos negativamente. Si es posible, pide a alguien de confianza que visite a tu gato a las mismas horas cada día para alimentarlo, limpiar su caja de arena y ofrecerle un poco de compañía. Mantener esta rutina lo ayudará a sentirse más seguro y menos ansioso.

Gato durmiendo

Los gatos necesitan una vida rutinaria.

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3. Usar feromonas sintéticas

Las feromonas sintéticas, disponibles en varios formatos, pueden ser de gran ayuda para reducir el estrés de tu gato. Estos productos imitan las feromonas que los gatos producen de forma natural y que utilizan para marcar su territorio, creando un ambiente más relajado y familiar para ellos. 

Gato en el suelo

Las feromonas sintéticas contribuyen a calmar a los gatos.

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4. No olvidar los juguetes

Los juguetes, especialmente los interactivos, pueden mantener a tu gato entretenido y mentalmente estimulado durante tu ausencia. Los juguetes que dispensan comida, como los puzzles, no solo le proporcionarán entretenimiento, sino que también satisfarán su instinto de caza. Tampoco deben faltar los rascadores, e incluso puedes colgar de algún sitio el típico plumero de juguete que tanto les gusta intentar atrapar a los gatos.

Gato con juguete interactivo

Los juguetes interactivos estimulan la mente de los gatos.

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5. Poner música relajante

¿Sabías que la música suave puede tener un efecto calmante en los gatos? De hecho, hay un montón de listas de reproducción y canales específicos con música para mascotas que pueden ayudar a reducir la ansiedad de los mininos. Por ello, otra opción es dejar un dispositivo reproduciendo música relajante a un volumen bajo mientras no estás. ¡Tu gato lo agradecerá!

Gato escuchando música

La música suave calma y relaja a los gatos.

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6. Dejarle ropa con tu olor

Dejar en su camita una prenda de ropa que hayas usado recientemente –como unos calcetines– puede ser muy beneficioso para tu gato, ya que la familiaridad del olor le proporcionará una sensación de seguridad.

Gato tumbado junto a los pies de su dueña

A los gatos les relaja mucho el olor de sus dueños.

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7. Comunicación visual

Si cuentas con una cámara de vigilancia con micrófono, puedes comunicarte con tu gato de vez en cuando. Aunque los gatos no siempre responden a las llamadas como lo haría un perro, escuchar tu voz puede ser reconfortante para ellos. Además, hay algunos dispositivos en el mercado que hasta permiten liberar golosinas, lo cual puede ser un incentivo adicional.

Gato siendo vigilado

Un gato siendo vigilado por la cámara.

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8. Contratar a un cuidador de mascotas

Si tu ausencia va a ser prolongada, valora seriamente la posibilidad de contratar a un cuidador de mascotas. Además de encargarse de las necesidades básicas de tu gato, también le brindará atención y jugará con él, algo crucial para su bienestar emocional. Eso sí, asegúrate de elegir a alguien con experiencia y buenas referencias. Además, también es importante saber si tu gato va a estar en una casa con otros animales o si solo lo cuidará a él. 

Mujer abrazando un gato

Los cuidadores de mascotas son de gran ayuda.

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Si tienes alguna duda o no estás segura de qué técnica aplicar con tu gato, lo mejor que puedes hacer es consultarlo con tu veterinario de confianza. En algunos casos, cuando el estrés es más extremo, te puede recomendar suplementos naturales o medicación para ayudar a reducir la ansiedad. También se ha comprobado que el aceite de CBD para mascotas puede calmar estos síntomas, pero se debe utilizar bajo prescripción del veterinario.