La situación es la siguiente: acabas de bañar a tu perro con ese champú que le deja un olor maravilloso y una suavidad alucinante en el pelo, pero al cabo de unos días, a base de paseos y juegos en el parque, vuelve a adquirir ese aroma perruno que invade todos los rincones de la casa. Te suena, ¿verdad?
Cuando esto ocurre, algunas personas deciden volver a bañar a su perro, sin embargo, esta acción puede entrañar serios peligros para el animal, ya que los baños frecuentes pueden hacer que su piel se vuelva más sensible e incluso que comience a desarrollar picores, sequedad y descamación. Además, los baños de forma continuada eliminan la capa protectora de su piel, esa que sirve como escudo natural ante las diversas inclemencias del tiempo. Entonces, ¿cómo hacer que tu perro huela bien sin tener que bañarlo? Por suerte, existen varias formas de conseguirlo. ¡Te las contamos a continuación!
Lavar la ropa de cama
Sudor, pelos, polvo... La ropa de cama de los perros, así como los juguetes de tela, cogen mal olor enseguida. Da igual que bañes a tu perro cada mes si después se va a tumbar en una cama sucia. Por tanto, acostúmbrate a lavar todas sus cosas una vez a la semana (incluso más en verano), pero siempre con detergentes suaves y neutros para evitar irritaciones en su piel.
Un perro en su cama.
Cepillar el pelo con frecuencia
El cepillado regular es fundamental para mantener el pelo de tu perro limpio. Con esta práctica, se eliminan el pelo muerto, la suciedad y otros residuos que pueden causar malos olores. ¿Y qué hay de la frecuencia del cepillado? Pues depende del tipo de pelo de tu mascota y de si es o no época de muda. Los perros de pelo largo requieren cepillados diarios, mientras que los de pelo corto se pueden espaciar más en la semana (entre 2 y 3 veces es suficiente).
Una mujer cepillando el pelo a un perro.
Toallitas húmedas para mascotas
Las toallitas húmedas diseñadas específicamente para perros son una excelente opción para limpiar a tu mascota sin necesidad de darle un baño. Estas toallitas pueden utilizarse en zonas como las patas, el hocico y otras áreas que tienden a ensuciarse. Eso sí, asegúrate de elegir toallitas hipoalergénicas y sin fragancias fuertes para no perjudicar su piel.
Un hombre limpiando con una toallita a un perro.
Vinagre de manzana
El vinagre de manzana es otro remedio natural que puede ayudar a mantener el buen olor de tu perro. Para ello, solo tienes que mezclar una parte de vinagre de manzana con una parte de agua en una botella con pulverizador.
A continuación, rocía ligeramente el pelo de tu perro, cepíllalo y... ¡listo! ¿Sabías que además de contribuir a neutralizar los olores, el vinagre también tiene propiedades antibacterianas que pueden ser beneficiosas para su piel?
Vinagre de manzana.
Bicarbonato de sodio
El bicarbonato de sodio es conocido, entre otros, por sus propiedades desodorantes, y su uso en los perros no podría ser más sencillo. Comienza espolvoreando un poco de bicarbonato de sodio sobre su pelo y frótalo suavemente. Déjalo actuar durante unos minutos y luego cepíllalo para eliminar cualquier residuo. Este método ayudará a neutralizar los olores y dejará a tu perro con un aroma fresco. Lo mejor de todo es que es natural.
Bicarbonato de sodio.
Champús en seco
Los champús en seco para perros son otra alternativa a los baños tradicionales. Estos productos actúan absorbiendo el exceso de grasa y eliminando los olores del pelo, al igual que hacen en el cabello humano. ¡Imprescindibles!
Un perro con el pelo limpio.
Higiene bucal
El mal aliento puede ser tan potente que incluso llegue a eclipsar el olor del pelo sucio, y si hablamos de una raza de perros grandes o gigantes, ya ni te contamos... ¿La solución? Cepillar los dientes de tu perro a diario utilizando un cepillo y pasta de dientes específicos para mascotas. Otra opción es ofrecerle golosinas dentales y juguetes masticables que lo ayuden a mantener una correcta higiene bucal. No obstante, para obtener los mejores resultados lo ideal es combinar los cepillados diarios con las golosinas o juguetes.
Un perro sosteniendo un cepillo de dientes.
Cambiar la dieta
Quizá no le des demasiada importancia, pero la dieta de tu perro juega un papel crucial en su olor general, de la misma manera que nuestra alimentación influye en el olor de nuestro aliento y sudor, por ejemplo. Así que asegúrate de que el pienso que consuma sea de la mejor calidad y esté protagonizado por proteínas de origen animal, preferiblemente carne.
Un perro comiendo.
Ambientadores naturales
Un ambientador en sticks.
Utilizar ambientadores naturales en tu hogar puede ayudar a neutralizar el olor de tu perro y a crear ambientes frescos y agradables. Asimismo, en las tiendas de animales también puedes encontrar sprays desodorantes para perros con mal olor que marcarán un antes y después en tu día a día.