Solemos colocar las mesas auxiliares a un lado del sofá y sus compañeros fieles son una lámpara y la fotografía aquella que tan buenos recuerdos nos trae. Sin embargo, existen infinidad de ideas para darles juego, utilidad y aportar un toque especial a nuestra decoración. Lo único que tienes que hacer es dejar volar tu imaginación e inspirarte con esta selección que traemos para ti. Verás que una mesita auxiliar puede alegrar muchos más espacios de los que imaginas.

Tips básicos para darle protagonismo

No te limites

Te vamos a desvelar un secreto: las mesas auxiliares pueden salir del salón… ¿Te lo habías planteado siquiera? Parece que limitamos su uso a un pequeño rincón entre sofá y sofá, pero lo cierto es que puede ser una gran compañera de lectura, una pinche de cocina estupenda e incluso acompañarte en tus tardes de spa. La cocina, el baño, la terraza, el pasillo, la habitación; cada espacio que tengas puede ser perfecto para complementar con una mesita llena de intención.

Rincones con historia

Aprovecha estos pequeños espacios para hacer una especie de decoración temática: que te encantan los frascos de cristal, pues combínalos por formas y tamaños, adorna con algo de follaje, hojas secas y ¡voilà! una botica antigua en el salón; que lo tuyo es más bien la jardinería, prueba a poner un pequeño invernadero junto a la ventana. Da rienda suelta a tus deseos y experimenta el placer de decorar con objetos especiales para ti.

Explota tu creatividad

Quien dice mesa, dice banco, bandeja, puff. No solo es importante decorarla, también lo es la mesa en sí misma y aquí queremos que vuelvas a abrir miras. Puedes colocar una bandeja grande sobre un soporte y poner vasos y bebidas sobre ella; hacer que el taburete se transforme en un auxiliar perfecto para poner tus cremas del baño; o emplear un tronco ancho de madera para dejar tus libros favoritos. ¡Todo es una mesa auxiliar en potencia!