1. Un dormitorio juvenil con zonas independientes Gracias a la amplitud de este dormitorio juvenil , las dos hermanas que lo habitan pueden tener cada una su espacio independiente y sin posibles conflictos. Como se aprecia en el plano, ambos lados, separados por un muebles abierto, cuentan con la misma distribución. Juntas pero no revueltas Una de las claves del dormitorio fue separar los dos espacios con un mueble de obra que alberga tanto estantes como los escritorios de las niñas. Se trata de una opción versátil que ofrece espacio para que ambas tengan un área de estudio, así como mucho almacenaje. Con independencia, pero unidas Por el diseño y porque, al fin y al cabo, la estantería es abierta. Pero cada una tiene una zona en la que colocar sus cosas. En este lado se encuentra el acceso a la habitación (como podrás ver en el plano anterior), mientras que en el otro lado hay una armario empotrado y un gran ventanal que baña todo con luz natural. Mobiliario, diseño de Marta Tobella. 2. Dos habitaciones infantiles unidas, pero separadas Y es que la solución para que estas dos hermanas tuvieran sus habitaciones unidas, pero separadas, fue colocar una puerta corredera entre ambas, que no roba ni un solo centímetro. Después, se ha colocado el amueblamiento de manera simétrica. Además, cada una tiene su acceso independiente. Dos dormitorios unidos o separados, dependiendo del momento Y es que gracias a la puerta corredera, ambas hermanas puedes disfrutar de un espacio más grande para jugar, si dejan la puerta abierta; o lograr más intimidad si la cierran. Proyecto decorativo de Dijous. Lámpara de techo y alfombra, de Filocore. Silla, en Sacum. Equipadas con todo Con la misma distribución y los mismos muebles (así no hay conflictos), ambas habitaciones cuentan con una cama nido con almacenaje, un cómodo escritorio blanco y una estantería. 3. Un dormitorio infantil con lo básico Cuando el dormitorio infantil es pequeño y no hay mucho espacio para demasiadas piezas, hay que limitar los muebles a lo básico: una cama, un armario y un pequeño escritorio para que el peque pueda dibujar. Poco espacio, pero muebles versátiles De hecho, para aprovechar el espacio, se eligió una cama nido que lo tiene todo. Se trata del diván HEMNES de IKEA que, además de una cama extra para las visitas, cuenta también con cajones para guardar los juguetes. Cama con cajones, lámpara aplique y cortinas, de IKEA. Taburete, en Filocolore Alfombra, en Sacum. 4. Un dormitorio para dos hermanos Este dormitorio es también para dos niños que comparten habitación. Pero, en un principio ambas estancias estaban separadas. Por eso ahora, sin el tabique pueden disfrutar de más espacio para jugar y contar con una casita genial para leer o esconderse. ¿Lo vemos? Un gran mueble que recorre la habitación de lado a lado Lo podrás ver con más detalle en el plano anterior: ambas camas, así como el mueble que recorre la estancia de lado a lado y que los une, es un solo mueble. Lo mejor es que regala muchísimo espacio de almacenaje para guardar ropa y juguetes. Por cierto, ¿te has fijado que la cama es nido? ¡Perfecta para las visitas! Una casita de juguetes con ruedas Uno de los elementos que más nos gustan de este dormitorio es su casita de juguetes, que separa visualmente ambos espacios, y que cuenta con ruedas, lo que permitirá moverlo cómodamente cuando sea necesario. ¡Y tiene espacio para los dos! 5. El dormitorio ideal de una adolescente Y es que, según apreciamos en el plano, este dormitorio juvenil ¡lo tiene todo! Una cómoda cama, un gran escritorio, zona de tocador y hasta un futón en la esquina perfecto para relajarse. Mira, mira. Con todo lo que necesita una jovencita Como hemos visto en el plano, a este dormitorio no le falta de nada. ¡Pero tampoco almacenaje! Y todo gracias a la estantería a medida y a media altura que ocupa la pared y que se convierte en cabecero y en escritorio. Y cuenta con estantes y cajones, igual que la cama. Mobiliario, realizado a medida por Thinking Home. Alfombra de Sisal, de India&Pacific. Taburete y silla, en La Maison. Papel pintado, modelo Adagio, de Khroma. 6. Un dormitorio con dos áreas que todo niño desearía Con una zona de descanso y otra para jugar y estudiar, este dormitorio es, sin duda, el espacio soñado de cualquier niño o niña. Zona de descanso con muchos armarios Porque hay que ser previsor para esa época en la que los niños abandonan la niñez y empiezan a acumular ropa, juguetes, accesorios deportivos. En este caso, para darle un toque más femenino, las puertas acristaladas se cubrieron con unos visillos de tela rosa, el mismo color que predomina en todo el dormitorio. Armario, diseño de la decoradora Bárbara Chapartegui. Papel pintado, de Belynda Sharples. Pavimento, de madera de roble de Lugnum. Una zona de relax y estudio En la otra estancia, un cómodo sofá bajo la ventana será el mejor espacio para leer y desconectar. La habitación cuenta también con un cómodo escritorio. Y, para diferenciarlo de la zona de descanso, las paredes se han decorado con un bonito papel pintado florido. Sofá, diseño de la decoradora Bárbara Chapartegui, tapzado con tela de Gastón y Daniela. Papel pinado, de Belynda Sharples. 7. Un dormitorio con muebles a medida Para aprovechar al completo un dormitorio infantil (igual que en cualquier otra estancia), los muebles a medida son grandes aliados. En este caso, desde el cabecero de la cama sale un estante bajo que termina convirtiéndose en escritorio. Un dormitorio atemporal Con una vocación atemporal, este dormitorio infantil presume de muebles blancos a medida que aprovechan todo el espacio y regalan muchísimo almacenaje. Para darle personalidad, el papel pintado de estampado floral se ha combinado con una pintura ocre que aporta calidez, así como la alfombra de fibras. Mobiliario, de DM lacado, realizado a medida según el diseño de Emma Masana. Papel pintado, de Papeles Aribau y silla de Casa Viva. Si quieres estar al día de todo lo que publicamos en www.elmueble.com, suscríbete a nuestra newsletter .