Enamórate del blanco y no temas abusar de él El blanco es el color estrella del estilo nórdico . Lo verás en muebles, paredes, techos e incluso suelos. Por eso, en un recibidor nórdico no puede faltar. Eso sí, es clave que el blanco sea cálido, es decir, que vire a amarillo, nunca a azul, porque el efecto sería frío, que es precisamente lo contrario que busca el estilo escandi . Si no quieres un total look en blanco, puedes introducir toques de madera –siempre clara–, detalles de fibras naturales o algún accesorio de color, como se ha hecho en este recibidor proyectado por Mengíbar Blanco Estudio. Abre paso a la luz La luz es un tesoro que los países nórdicos miman al máximo. Por eso el blanco es uno de sus colores estrella y las maderas siempre son claritas, para que la poca luz que entra en sus hogares –piensa que hay meses en los que se impone la oscuridad– se multiplica hasta el infinito. Por eso, cualquier solución que ayude a que la luz fluya es más que bienvenida. En este recibidor, decorado por Paula Duarte, la interiorista no solo se ha aliado con el blanco, sino que ha abierto una cristalera para que la luz de la zona de día llegue, también, a la entrada. Zapatero de IKEA, banco de Cidón y cristalera diseño de la decoradora. Viste el recibidor con plantas o arreglos naturales Lo natural, ya lo hemos comentado, está muy presente en la decoración de estilo escandi. Por eso las plantas de interior o los ramos no pueden faltar en un recibidor nórdico. Los arreglos de verde funcionan muy bien, y además de ser económicos, se conservan en buen estado durante más tiempo que los ramos de flor cortada . En este recibidor, proyectado por Asun Antó, la celosía de lamas de madera junto con el banco de look artesanal dan un aire muy nórdico al espacio. Banco de Carolina Blue y celosía diseño de la decoradora. Atrévete con propuestas 'handmade' El estilo nórdico ama la artesanía y la filosofía DIY. Por eso, si se te dan bien las manualidades, no dudes en darle ese toque handmade a tu recibidor nórdico. Puedes inspirarte en esta propuesta, donde una rama de un árbol se ha convertido en un original y decorativo perchero. El banco de madera y las estanterías blancas acaban de dar ese aire nórdico a este coqueto recibidor. Estanterías y mueble bajo diseño de los arquitectos Cristina Manene y Fernando Orte. Elige muebles o complementos de maderas claras La madera es un must en la decoración nórdica. Por eso, si quieres que tu recibidor respire un sabor nórdico no lo dudes y alíate con ella. Las maderas que mejor funcionan son las variedades claras, como el haya o el abedul, y en acabados naturales o raw, como el perchero, las vigas del techo o la puerta de este recibidor. El banco, de sabor artesanal, y el blanco que se impone en paredes, techo y carpintería también refuerzan este look. Menos es más, una decoración sin artificios El estilo nórdico es muy acogedor, pero a su vez es sobrio y muy funcional –no es casual que IKEA naciera en Suecia–. A la hora de decorar un recibidor de look nórdico, es mejor elegir pocas piezas, pero que sean prácticas, y apostar por una decoración sin artificios. Los muebles de líneas depuradas y orgánicas se imponen en este estilo. Aparador, de La Brocanterie. Apuesta por alguna pieza de diseño escandinavo ¿Quieres que tu recibidor respire un aire nórdico? ¡Apuesta por algún mueble o complemento de diseño escandinavo! En este mini recibidor, se ha complementado la decoración con los icónicos colgadores The Dots de la firma escandinava Muuto. Además de ser prácticos, se convierten en un elemento decorativo por sí solo. Colgadores de Muuto, banco en Bazaar Barcelona y lámpara de Santa & Cole. Que no falten los elementos inspirados en la naturaleza Que el estilo nórdico es aficionado a crear espacios naturales no es ningún secreto. Por eso es habitual que se inspire en la naturaleza para decorar sus espacios. Como en este recibidor, donde el elemento estrella es el perchero que imita el tronco de un árbol. Este elemento, por sí solo, da un look muy escandi a este recibidor pequeño pero con mucho encanto. Haz más acogedor el recibidor con velas La decoración con velas nunca falta en una casa nórdica. El tintineo de la llama crea espacios más íntimos, acogedores, y envolventes, en definitiva, más cosy , que es una de las máximas del estilo nórdico. En este recibidor, la decoradora Asun Antó ha combinado velas en portavelas de cristal con otras en vaso, que ofrecen una luz más tamizada. Consola, de Cado. Lámpara, de El Corte Inglés. ¿Te atreves con un ciervo en tu recibidor? Los ciervos, los renos y las cornamentas son un elemento muy presente en la decoración nórdica. Los vemos en cuadros, en cojines, en cabezas decorativas de peluche o tridimensionales de madera... En un recibidor rústico o de una casa de montaña será un complemento que dará un toque muy nórdico, como en este recibidor, que respira un aire 100% escandinavo. Si quieres estar al día de todo lo que publicamos en www.elmueble.com, suscríbete a nuestra newsletter .