Suelo hidráulico: 25 razones por las que sigue siendo el suelo en tendencia

Una de las ventajas del pavimento hidráulico es que decora por sí solo. No tendrás que hacer mucho más para conseguir un espacio acogedor. En el caso de que los colores sean intensos, abusa en el resto de la decoración con el blanco. Después decántate por piezas ligeras y de diseño sobrio. Y añade unas cestas de fibras, ¡le quedan genial!

Si has comprado un piso de segunda mano puede que el suelo que tenga sea de baldosas hidráulicas originales. Antes de retirarlo plantéate recuperarlos. Hay empresas especializadas que lo limpian y recuperan su antiguo esplendor. Y su belleza es inigualable. 

Los motivos florales son perfectos para dar un toque único a la decoración. Conseguirá que todas las miradas se las lleven estas originales baldosas, que aunque muy comunes en baños y cocinas, también se pueden ver en dormitorios o salones. 

Los motivos geométricos en el suelo hidráulico será la mejor opción para una cocina de estilo clásico en la que no quieres recargar el ambiente. Asegúrate de que los colores están también presentes en el resto de la decoración.

Es habitual que los suelos hidráulicos originales cuenten con una cenefa que recorre todo el perímetro de la estancia. Si los recuperas, deja que sus motivos geométricos e intrincados se luzcan. Y lo mismo con el resto de baldosas. Aquí, con estrellas, aportan un look moderno y actual. 

Si eliges un suelo de un color predominante, elige distintas intensidades y variaciones del mismo color para el resto de la decoración. En dormitorios es una apuesta segura. Aquí el suelo blanco, gris y azul, se encuentra con la butaca de azul petróleo y la ropa de cama en varios tonos de azul. 

La cantidad de diseños que podemos encontrar en los suelos hidráulicos (desde geométricos, florales hasta originales estampados de cenefas) lo convierten en una alternativa muy versátil que encaja en cualquier estilo. Incluso si mezclas tendencias, consigues espacios muy acogedores. Aquí el suelo con medallones clásicos es la mejor combinación con el mueble de baño de madera al natural.

Si el suelo de baldosas hidráulicas es llamativo en cuanto a colores y motivos, lo ideal es que sea el protagonista de la decoración. Emplea materiales y diseños ligeros, así como colores neutros y suaves que combinen con los del suelo. 

Una de las características de las baldosas hidráulicas es la cantidad de acabados que ofrecen. Si quieres un toque diferente en la cocina, pero sin que sea demasiado llamativo, elige tu suelo hidráulico de tonos suaves y con discretos motivos.

Pero los suelos hidráulicos también son la opción idel para quienes buscar llevar el color y la alegría a una cocina. Y lo mejor es que este tipo de baldosas queda bien en todos los estilos decorativos, incluso en las más modernas o de diseño, como esta. Y se lleva bien con otros acabados y materiales. Aquí, se ha emparejado con el mármol de la isla y el antepecho. 

Los suelos hidráulicos son bonitos, eso es innegable. Algunos, incluso, preciosos (porque son verdaderas joyas artesanales). Su fuerza y atractivo son indiscutibles, ya que su mera presencia dota automáticamente de personalidad a un espacio. Para acertar, cédele todo el protagonismo ya lo instales en una cocina, baño u otra estancia. Apuesta por colores lisos alrededor. Los neutros siempre funcionan pero puedes jugar con algún color en bloque, de los presentes en el hidráulico.

Retro, vintage, shabby, incluso. El estilo decorativo más clásico y rústico también se ve reforzado con la presencia de un suelo hidráulico o de azulejos de este tipo. Basta con escoger este revestimiento para que la base ya luzca ese encanto del pasado. Si además lo acompañas de muebles de líneas que encajen, tendrás un resultado perfecto.

Hasta los ambientes más actuales se cargan de personalidad y calidez con un suelo de baldosa hidráulica. Y la cocina suele ser un buen ejemplo con muebles de líneas rectas y un alarde de innovación a través de los electrodomésticos más tecnológicos. Este tipo de revestimiento rompe la rigidez de algunos materiales y de las líneas rectas.

Aún con muebles en color negro (como los de esta mini cocina). Y es que los suelos de mosaico hidráulico aceptan todas las combinaciones cromáticas que imagines y el resultado es vistoso, dinámico y alegre. Encontrarás diseños que combinan tres tonos y otros hasta seis. Aunque parezcan desordenados en su composición y mezclas, están equilibradamente diseñados. ¡No tengas miedo!

Otra razón para amar el suelo hidráulico en cocinas o en cualquier rincón de la casa es que hasta en tonos neutros (los que combinan grises y blancos o tierras y arenas en sus motivos) tiene presencia y personalidad. Y resultan luminosos y sosegados. No destaca por su fuerza visual a través del color pero sí por los matices que aportan los dibujos.

Aunque realmente no hay material que se le resista a un suelo hidráulico, la madera, con su calidez, es uno de los acabados que mejor encajan. Es neutro pero acogedor y decorará sin restar protagonismo a la baldosa. El resultado es atemporal. Si quieres un ambiente más moderno, apuesta por lacas. Si buscas tradición, decántate por maderas en tonos más oscuros o acabados toscos.

Y puedes hacer mil y una combinaciones con él. Combinando diferentes suelos hidráulicos que te ayuden a delimitar zonas en un espacio abierto o mezclando hidráulico con otros pavimentos -microcemento, parqué, cerámica, laminado…- porque va con todo. Si lo unes con otro pavimento monocromático, como en este caso, la combinación es perfecta.

Si no quieres usar la baldosa hidráulica para revestir todo el suelo de una habitación, puedes crear "alfombras" de hidráulico y así delimitar zonas dentro de un mismo ambiente. Es lo que se ha hecho en este rincón de lectura. Pero al mismo tiempo puedes añadir solo un detalle con una cenefa de azulejo hidráulico que delimite el perímetro de una estancia o una zona concreta. 

Un ambiente neutro y sencillo no es un error pero puede sentirse frío o soso. Basta un suelo hidráulico para que se transforme por completo porque su estampado y colorido se lleva a la perfección con otros revestimientos y materiales más sencillos.

Si bien los suelos hidráulicos originales reproducían motivos florales o geométricos de inspiración floral, los modelos se han actualizado para que hasta el interiorismo más actual pueda lucir uno. Así los motivos gráficos conquistan el mosaico hidráulico para revestir suelo y paredes y lograr potentes efectos visuales.

Aunque en exteriores y estancias como cocinas y baños necesita un barniz impermeabilizador para protegerlo de la humedad -si hablamos de las auténticas baldosas hidráulicas-, debido a su porosidad, es fácil de mantener (basta con agua y jabón neutro) y resistente. Si optas por cerámicas que imitan este acabado entonces tendrás toda la comodidad. Es perfecto para zonas húmedas (tanto en suelos como en paredes). También hay vinílicos con acabado hidráulico para un cambio exprés.

El boom que han experimentado en los últimos años el suelo hidráulico ha hecho que proliferen propuestas de diferentes firmas a precios asequibles. Puedes optar por comprar los auténticos, más caros, o los cerámicos, más económicos. Incluso, como ya hemos mencionado las versiones vinílicas.

Desde la casa de campo, al piso céntrico de toda la vida situado en una finca regia y recuperado, el ático nuevo que quiere diferenciarse de los estándares o la segunda residencia decorada a base de muebles sencillos que necesita un plus para brillar.

Con un suelo hidráulico en tonos blancos y negros tendrás un plus de elegancia asegurada en tu casa. Tanto las baldosas como los azulejos hidráulicos siempre son un valor añadido. Sofisticado con motivos de menor tamaño e impactante decorado con los dibujos más grandes.

Del suelo a la pared. El azulejo hidráulico también queda genial como antepecho en la cocina o en los baños, incluso, para revestir la encimera. Sácalo de contexto y tendrás el impacto asegurado. Aquí se ha usado para revestir la pared trasera del lavabo y, de paso, imponer estilo.