Todas las estancias de la casa son importantes. Hay algunas en las que pasamos más tiempo que otras, como el salón o el dormitorio, y por esa razón, les prestamos más atención a la hora de decorar. En cambio, otras, como los pasillos o el hall, los relevamos a un segundo plano porque no estamos largas horas entre sus paredes. 

El recibidor es el primer soplo de aire hogareño cuando llegamos de un largo día de trabajo, la primera impresión de lo que somos ante las visitas y el rincón que vertebra las otras estancias. Por eso, cabe tenerlo todo bien ordenado y bonito. En lo que a mí respecta, me di cuenta de que mi recibidor pequeño ¡era un desastre! Y por esta razón, decidí que ordenar todo con cestas era la mejor manera de eliminar el ruido visual y ponerlo todo "bien bonito".

Y claro, en IKEA encontré la solución, ya que tiene los diseños más estilosos y elegantes, a un precio más que razonable. Sus propuestas dan equilibro al espacio y permiten almacenar todo tipo de objetos. Los materiales y tejidos que he seleccionado dan a mi casa un toque de naturalidad. Te lo cuento todo a continuación.

Las cestas de IKEA que han solucionado el caos de mi recibidor 

Cesta de IKEA

Sus medidas son 32 x 33 x 32 cm. 

IKEA

1. El toque más natural

Una de las piezas para que tu recibidor esté bien ordenado y, además, bonito, es esta cesta hecha de junco marino. Es un material natural, que no se estropea con facilidad y que te puede durar toda la vida. Está trenzada a mano y se complementa con una estructura de acero que hace que la cesta no se doble ni corra el riesgo que pierda su forma si es pisada. Aporta firmeza y rigidez a un espacio que necesita organización. Es perfecta para guardar libros, revistas y esas cosas que no aguantarían en cestas con una composición más moldeable. 

Cesta TOLKNING

Sus medidas son 35 x 30 x 20 cm

IKEA

2. Para los pequeños detalles 

Poner un colgador incorporado en la pared es la mejor opción para ahorrar espacio en el recibidor. Para colgar las chaquetas, bufandas o blusas es genial, pero muy poco práctico para dejar los complementos. Un consejo poner una cesta pequeñita, como la de la foto, para dejar esas cosas que no ocupan demasiado, pero que pueden proporcionar un gran desorden si están por el medio. Algunas son los pañuelos, paragüas, guantes... Además, es tan discreta y ligera que también la podrías utilizar como bolso para salir a la calle. Su composición es de yute, un material de fibras naturales que siempre da un ambiente muy acogedor a cualquier estancia. 

Cesta Växthus

Sus medidas son 30 x 30 x 30 cm. 

IKEA

3. No te agobies por los textiles 

La ropa de cama y los restos de textiles son unos elementos indispensables en nuestras casas, pero si no se guardan como es debido, nos pueden dar la sensación de que todo es un desastre. Si no quieres que te ocupen más espacio en el salón, ponlas en el recibidor bien dobladas al más puro estilo Marie Kondo. Además, también puedes poner aquellas piezas de ropa de invierno como gorros o bufandas. Esta cesta está hecha de ratán de plástico, un componente muy resistente y original. 

FLADIS cesta

Sus medidas son 32 x 25 x 18 cm

IKEA

4. La indispensable 

La forma y el material de esta cesta es la más común de nuestras casas. Su multifuncionalidad es capaz de almacenar cualquier cosa y nos permite ponerla en todo tipo de espacios. Esta también está hecha de junco de agua, por lo que tu recibidor, tendrá un toque muy elegante. En la entrada puede quedar muy bien justo debajo del mueble principal y del espejo protagonista. Otra opción es situarlo en un rincón, pero haz que sea visible, para que no pierda su función decorativa. En mi caso la he sumado en mi recibidor también como objeto deco al ponerle una planta: mi Montsera deliciosa es el complemento ideal.

 

¡Novedad! ¡Tenemos canal de WhatsApp! Sigue toda la información sobre decoración, orden, limpieza y todo lo relacionado con el hogar en el canal de El Mueble en WhatsApp

 

Cuando compras a través de nuestros enlaces podemos ganar una comisión. Más información.