12 ideas fabulosas para decorar tu casa de verano y dejarla de revista

Si tienes la suerte de tener una casa con unas impresionantes vistas, ¡no las tapes! Deja que su belleza forme parte de la decoración de tu casa de verano. Además de optar por cortinas vaporosas y ligeras, es importante evitar tapar estas vistas con muebles o piezas que impidan disfrutar de su belleza. Si, además, reproduces en el interior los mismos colores que hay en el exterior, el equilibrio y el estilo estarán garantizados. 

Si en invierno los tonos como el blanco puro, el azul o el verde pueden resultar fríos, en verano son precisamente lo que necesita tu casa para conseguir que la deco sea más fresca y relajante. Y no hace falta que renueves toda la decoración. Para esto, las fundas de los cojines serán tus aliados. Y este es un tip que podrás usar también en tu piso en la ciudad si quieres que se vea más veraniego. 

No nos cansaremos de repetirlo. Las fibras naturales son tendencia y llegaron para quedarse. Ahora, su uso original lo encontramos en porches y terrazas de los que disfrutamos cuando llega el buen tiempo. Por materiales como el yute, el coco, el sisal o el ratán serán tus grades aliados para crear una atmósfera slow que invite a la relajación. Sillas, sofás, mesas y hasta accesorios decorativos como las lámparas y las alfombras de estos materiales son básicos en una casa de veraneo. 

La madera es uno de los materiales preferidos en decoración para garantizar la calidez. Pero también la calidad. Y en tu casa de verano también. Por eso, si tienes vigas y suelos de madera recupéralos para que luzcan con todo su esplendor. Y añade sillones y mesa con estructuras de madera. Combínalas con blanco y calidez y frescura irán de la mano. 

En verano, lo habitual es que la actividad del día a día se traslade al exterior. Pero para que sea una zona de cómoda y en la que apetezca estar es importante garantizar la sombra. Si tienes espacio, coloca una pérgola que garantice la sombra. Pero también puedes instalar un toldo, unas velas de sombreo o unas sombrillas que puedas trasladar donde quieras y la mejor opción si tu zona exterior es pequeña. 

Si tu casa de verano está en la playa, recrea ese ambiente también en el interior. Adornos como conchas y cuadros con motivos marinos como corales o similares te ayudarán a conseguir que la playa y el mar se cuelen en tu apartamento de vacaciones. ¡Conéctate al modo verano!

Si tienes una segunda residencia, no la decores solo de cara a disfrutarla en verano. Trátala igual de bien que tratas tu residencia habitual. Y es que seguramente también quieras disfrutar de ella en otros momentos del año. Por eso, una alfombra gustosa, unas mantitas para el sofá y una iluminación envolvente son claves para que tu casa de verano sea una casa para todo el año- 

No hace falta saturar la decoración de tu casa de verano para sentirla confortable. A veces hace más una pared con un solo adorno que llena de cuadros, fotos y otros elementos decorativos. Apuesta por el menos es más sin renunciar a la comodidad. Por eso debes pensar en qué necesitas para convertirla en un espacio más cómodo. ¿Un puff?, ¿una mesa auxiliar?, ¿un jarrón con plantas que regale vida? ¡Sí a todo! 

Tanto si tu casa de verano está en la playa como en el campo, es importante que te decantes por unas cortinas livianas y de colores claros que vistan tus ventanas. Este tipo de cortinas dejan pasar la claridad y la luz natural y no perjudican la sensación de amplitud y frescura. Además, será todo un placer ver cómo se mecen con la brisa veraniega. 

En el momento en el que pones un pie en tu casa de vacaciones deberías dejar atrás todo tipo de preocupaciones del día a día. Estás ahí para resetear y cargar las pilas. Por eso, te invitamos a que incluyas en la decoración piezas que inviten al relax y a la vida slow. Un sillón colgante puede ser la pieza clave que suba el nivel decorativo. Y no solo son aptas para el exterior, en el salón o el dormitorio se convertirán en ese mueble que levanta pasiones. 

No queremos que pases ni frío  ni calor. Por eso, al vestir la cama de tu casa de verano hazlo con capas. Así, las noches que refresque no tendrás que estar sacando las colchas del armario. Apuesta por tejidos naturales, como el lino y el algodón que permiten la transpiración y son mucho más beneficiosos para la piel. Asimismo, no escatimes en cojines. Tu cama de verano se merece el mismo tratamiento que la de tu casa. ¡Te encantará remolonear por las mañanas!

No escatimes en invertir en elementos que garanticen un cómodo sueño en tu casa de verano. ¡Lo agradecerás! En este contexto, un ventilador puede hacer que tus noches sean mucho más relajantes. Pero su estética suele chocar con el estilo y el espacio. ¿Una alternativa estética y que pasa desapercibida? Un ventilador de techo con aspas de madera con luz integrada.