Cuándo NO apoyar la cama en la pared del cabecero: 7 dormitorios acogedores bien decorados llenos de ideas para copiar
Existen un amplio abanico de posibilidades decorativas para tu cama, más allá de apoyarla en la pared del cabecero. En estos dormitorios la cama gana protagonismo, ¡no te los pierdas!
Redactora de El Mueble especializada en decoración y orden
Actualizado a 27 de febrero de 2024, 19:17
El Mueble
Aunque lo 'habitual' es que la cama se apoye en la pared del cabecero, hay veces que la distribución del dormitorio o las necesidades del espacio hacen que el cabecero busque otras soluciones muy decorativas también.
Un muro a media altura, un mueble de doble cara o un tabique acristalado son algunas de las opciones ingeniosas que permiten tener la cama ubicada en el centro de la estancia para aprovechar al máximo el paso de la luz y los metros.
1 / 7
Cabecero de madera y cristal diseño de Begoña Susaeta. Aplique de Marset.
El Mueble
Con un panel de madera y cristal el espacio y la luz se multiplican
En este dormitorio decorado por la interiorista Begoña Susaeta, de Sube Interiorismo, un tabique acristalado hace las veces de cabecero, permite el paso de la luz y conecta el dormitorio con el vestidor que, así, gana amplitud visual. “Este cabecero de hierro y cristal arriba y madera debajo, crea un corredor que aísla la zona del vestidor y a la vez deja que pase la luz”, explica la propia interiorista. El total look en blanco rebaja la presencia de los armarios y el panel y los cuarterones le dan un toque clásico muy favorecedor.
2 / 7
Cabecero diseño de Coton et Bois con papel pintado de Flamant.
El Mueble
Un murete-cabecero muy elegante para un dormitorio con muchas ventanas
Poner un cabecero a medida que es a su vez un murete divisor fue la clave para acertar con la distribución en este dormitorio reformado por la interiorista Asunt Antó, de Coton et Bois. "Al crear un espacio abierto teníamos tantas ventanas que nos faltaban paredes donde apoyar. La solución fue colocar la cama en medio y convertirla en el eje central de la decoración", explica Asun. Así, el murete cumple la función de cabecero, separa la cama de la zona de tocador y da privacidad. Integra unas hornacinas a modo de mesilla y está rematado por una balda de madera y un decorativo papel pintado. "Le pusimos papel pintado de efecto textil, que recuerda la clásica raya diplomática, así se ve más vestido", concluye Asun.
3 / 7
Cabecero, armarios y mesilla diseño de Meritxell Ribé-The Room Studio.
El Mueble
Un cabecero de madera con mesilla volada a juego con el suelo
“La habitación no tenía muchos metros y querían un armario de punta a punta del espacio. La mejor solución era poner la cama delante, tras un tabique bajo de madera que hace las funciones de cabecero y separador. De esta forma también creábamos un dormitorio más acogedor”, señala la interiorista Meritxell-Ribé de The Room Studio, artífice del proyecto. La combinación de blanco y madera en el dormitorio es la mejor elección cuando quieres que se llene de luz y calidez a partes iguales. El cabecero es de la misma madera que el suelo, lo que regala mucha más unidad al espacio.
4 / 7
Cabecero y cortinas de Gla Empordá. Murete a medida y alfombra de Coco-Mat.
El Mueble
La cama apoyada en un murete a media altura
En esta casa de aire provenzal del Ampurdán los propietarios querían que el dormitorio se llenara de luz y amplitud. Por eso la decoradora Blanca Berenguer ha apostado por colocar el vestidor detrás de un tabique a media altura y apoyar ahí el cabecero. De este modo, la luz circula a sus anchas por toda la estancia y el vestidor queda abierto a la zona de descanso. El tabique y los armarios están pintados del mismo color que paredes y techo, lo que crea un ambiente mucho más envolvente. El tabique, además, se ha aprovechado para integrar la iluminación en él. Las mesillas de madera, apoyadas también en el murete, se suman al aire entre rústico y provenzal de todo el dormitorio.
5 / 7
Cabecero hecho a medida y mesilla de madera, en Nezha Kanouni. Lámparas similares en House Doctor.
El Mueble
Cabecero mullido por un lado, escritorio por el otro
Moderno y confortable, así es este dormitorio decorado por la interiorista Nezha Kanouni. El cabecero a medida es un diseño suyo que sirve para diferenciar dos ambientes en el dormitorio. Por un lado, la zona de descanso en la que es un mullido cabecero y, por el otro, alberga una completa mesa de estudio, también a medida. El color blanco llena de luz todo el dormitorio y solo es matizado por los toques de negro en las carpinterías, que ponen un contrapunto actual, y la calidez de los textiles en crudo y beige.
6 / 7
Cabecero con estantería y hornacina de DM lacado y roble diseño de Pia Capdevila.
El Mueble
Un cabecero con triple función
Apoyar, guardar y separar. Estas son las tres funciones que este cabecero a medida, diseñado por la interiorista Pia Capdevila, cumple en este dormitorio. "Para aprovechar al máximo las vistas, coloqué la cama en el centro del dormitorio", cuenta Capdevila. Esta ubicación poco habitual ha condicionado toda la distribución del dormitorio. El cabecero hace de separador con la zona de vestidor, que queda a sus espaldas, su superficie sirve de apoyo y para decorar; y su interior se ha aprovechado con una hornacina en la trasera y una mini estantería en uno de los laterales. Más aprovechado, imposible.
7 / 7
Cabecero con mesillas integradas diseño de Asun Antó. Apliques Tolomeo, en Punto Luz.
El Mueble
De DM lacado en blanco y con todo integrado
De unos 270 cm de ancho x 140 cm de alto, este cabecero a medida es perfecto para enmarcar la cama y potenciar el paso de la luz y la sensación de amplitud. Es un diseño de DM lacado de la interiorista Asun Antó que ha integrado las mesillas voladas en el propio cabecero a la vez que ha empotrado los apliques "que así no ocupan espacio", afirma Antó. El sobre del cabecero sirve, además, para apoyar y decorar con objetos y plantas. Y por la parte de atrás esconde otra función: integra dos prácticos armarios zapateros con mucha capacidad. Todo en blanco y de líneas rectas es mucho más ligero y limpio visualmente.