Consolas 'mini' para recibidores pequeños y muy estrechos: 6 FOTOS e ideas elegantes y llenas de estilo de la revista El Mueble para inspirarte

Aligerar el ambiente es vital en pasillos y recibidores estrechos. Cuantos menos muebles y trastos haya por el suelo, mejor. Por eso, una opción interesante son las consolas suspendidas de la pared, que eliminan peso visual a la estancia y permiten una mejor circulación. En este caso, no es más que un estante de mármol bajo la ventana, muy elegante y discreta. La ventaja es que es práctico para dejar cosas cuando llegas a casa y no sobresale demasiado de la pared para que no molesten en el paso. Un sencillo perchero y un banco son sus discretos acompañantes.

Las patas chippendale son un clásico de la decoración. Son altas y esbeltas, con formas sinuosas que aportan siempre un plus de elegancia. Esta pequeña cómoda de la imagen llena el espacio por sí sola, a pesar de sus reducidas dimensiones. Con un sobre de mármol, un decapado con efecto envejecido y un tirador de latón antiguo, un recibidor estrecho y sin gracia puede convertirse en una bienvenida a casa con muchísimo encanto. Una lámpara de sobremesa y un espejo hacen el resto.

A espacios reducidos, muebles multifuncionales. Para eso, IKEA no tiene rival. Uno de sus grandes hits es el icónico modelo Hemnes, un zapatero muy funcional que simula ser una cómoda y queda perfecta en recibidores pequeños. En este caso, se han puesto dos módulos juntos y se han personalizado, cambiado su tapa original por una de madera que ha transformado totalmente su esencia. Con su fondo reducido, es una buena opción para dejar los zapatos y tener una superficie de apoyo. Suma el cerramiento de cristal que amplía el espacio.

Aquí entra en juego la regla de la compensación: si el recibidor es largo y estrecho, aprovecha el espacio a lo alto. Si no quieres prescindir de una consola todoterreno al llegar a casa, lo mejor es optar por un diseño esbelto, con cierta altura y poco fondo. En esta imagen vemos varias claves interesantes. Por un lado, el color dorado no es pesado y ayuda a relajar el ambiente con un punto de sofisticación. Por otro lado, los sobres en blanco ponen un contrapunto interesante para ganar aún más luminosidad. Para terminar, vemos que tiene una repisa en la parte inferior, lo cual duplica el espacio de almacenamiento y su potencial decorativo.  Añade unos farolillos y un espejo con el mismo acabado y el resultado será de diez.

Siempre que sea posible, una solución a medida suele ser ideal en espacios reducidos que te salvará de muchos apuros. Para aprovechar al máximo los metros cuadrados disponibles de este recibidor estrecho, se ha ideado un mueble que cubre por completo uno de los frentes. Tiene poco fondo, pero mucho almacenaje, gracias a unas puertas que se abren con push y prescinden de tiradores, creando más ligereza visual. Además, está lacado en un blanco roto, que siempre da luminosidad y hace que la estancia parezca menos abarrotada.

Cuando tenemos un recibidor estrecho, lo más importante es encontrar una cómoda de aspecto ligero y fondo reducido. Por eso, elegir un modelo con patas de acero, sin florituras y de líneas rectas, siempre será un acierto. Para darle un toque elegante y que no pase desapercibido, nunca está de más que tenga un sobre diferente, como este diseño en mármol con un discreto veteado blanco que suma puntos a la estancia. El resto de elementos que acompañan a la consola en los mismos tonos y hacen un conjunto espectacular en un espacio súper reducido.