Las COCINAS que encontrarás en la revista El Mueble de este mes: bonitas, elegantes, prácticas, ¡llenas de ideas!

Con el calorcito llamando a la puerta entran más ganas que nunca de disfrutar al aire libre. Y el número de junio de la revista El Mueble está cargado de porches y terrazas súper agradables y estilosos para que te pasees, desconectes y cojas las ideas que más te gusten. También encontrarás seis casas con unas cocinas fantásticas que te mostramos a continuación. ¡Ya tienes la revista en los quioscos! 

Aquí donde la ves, podría parecer que esta espectacular cocina de madera se encuentra en la montaña... pero lo cierto es que está en Mallorca y tiene salida directa al porche que protagoniza nuestra portada de junio. ¡Wow! Tiene elementos que le dan personalidad: las vigas del techo, el arco que enmarca la isla y un espejo en la zona del fregadero que regala profundidad. Las lámparas negras ponen un toque moderno y lo mejor es que está abierta a un comedor súper agradable, decorado con más madera y fibras naturales.

Esta cocina tan clara y luminosa es el corazón de un piso en Barcelona. A su propietario le encanta cocinar y soñaba con tener una cocina con isla con zona de almacenaje y cocción. La interiorista Sandra Mora se puso manos a la obra y le concedió el deseo, empotrando la campana en el techo y distribuyendo toda la zona de aguas y preparación en un frente paralelo. Aprovechó la cocina con una columna de horno y microondas, diseñó un armario alto en la esquina y se decantó por unos frentes completamente lisos en un tono piedra muy dulce que añaden elegancia y un toque moderno. 

Justo al otro lado de la isla, la interiorista cumplió el deseo de la propietaria, tener un office para los desayunos y las comidas más improvisadas. Lo diseñó con mucho gusto: aprovechó la esquina con un banco a medida con cajones para guardar, puso una mesa con sobre de mármol y base de una antigua máquina de coser, y dio encanto con un par de sillas de fibras y una lámpara de techo con pantalla textil. ¡Aquí empiezan los días con muy buen pie!  

Coqueta, fresca, romántica, campestre... ¿Cómo definirías tú esta cocina tan especial? Se encuentra en una casita en el Bajo Ampurdán y tiene muchos elementos que enamoran: las ventanas pintadas de verde, las vigas del techo blancas, el grifo de aspecto retro, el suelo de piedra rugoso... Y, por supuesto, el mobiliario, muy de campo con puertas y cajones de madera y encimera de microcemento. Su autora es la interiorista Lory Hansen, que no dudó en añadir tiradores modernos y negros para darle un contrapunto actual. La alfombra de fibras, la cortina de lino blanca y los ramos de flores son los toques finales.

En una casa de vacaciones en la Costa Blanca esta cocina nos ha robado el corazón. Las paredes, el techo, las cortinas, el suelo porcelánico blanco... crean una base con muchísima luz, mientras los frentes de madera y la imponente mesa añaden una buena dosis de calidez. Es una cocina moderna, donde mandan las líneas rectas, los toques negros (en la grifería y los tiradores) y las fibras de las sillas y la lámpara de techo. ¿Su artífice? La arquitecta técnica e interiorista María José Auñon Cabrera. 

Desde esta otra perspectiva vemos cómo cocina y recibidor comparten un mismo espacio abierto y blanco. Pero con elementos separadores: el armario del recibidor, la isla y la mesa dibujan una línea recta y articulan el espacio diáfano. En la isla se encuentra la placa de cocción y tiene una zona de barra con taburetes de madera. ¡Esto es entrar por todo lo alto! 

Si por algo llama la atención esta cocina abierta con península es por el color del mobiliario. Un verde imperial que le da muchísima personalidad y estilo. El estudio Fuertes Santamarta buscó el punto clásico con los frentes con molduras y eligió una encimera de aspecto mármol que va a juego con el suelo, que es original de la casa. La campana y los tiradores en cobre, junto a las lámparas de techo, de cristal envejecido, hacen que sea un placer sentarse en los taburetes de cuero y hierro y observar cada detalle.  

Entremos un poquito más adentro... ¡Porque la cocina tiene sorpresa! Un office más recogido al que le llega toda la luz y la brisa de la balconera de madera. Tiene una mesa redonda de look romántico y la acompañan unas sillas restauradas con chalk paint. La alfombra fue clave para vestir el suelo de mármol y crear un ambiente más confortable.

El contraste entre las paredes y el suelo es lo que da carácter a esta cocina en Madrid. La interiorista Begoña Susaeta, de Sube Interiorismo, jugó con el estampado vegetal del papel pintado y el dibujo del suelo de gres que imita un hidráulico. ¿La clave para que encaje? Todo sigue una misma línea de color: madera clarita, blanco y tonos tierra que actúan como hilo conductor. "Los propietarios son amantes de los fogones y querían una cocina espaciosa con office", nos cuenta Begoña, que lo situó frente a la ventana para disfrutar de las bonitas vistas al jardín. Con sus sillas de rejilla y su lámpara de fibras, ¡ha quedado muy acogedor!