"Hola, me llamo Nuria Arranz, tengo 43 años, soy soltera y vivo en Ortuella (Vizcaya). Soy abogada, pero siempre me ha gustado mucho la decoración, puede ser en parte porque mis padres han tenido una tienda de decoración durante más de cuarenta años, originalmente empezó como una droguería, de papeles pintados como se decía antiguamente, y con el tiempo evoluciono a artículos más relacionados con la decoración alfombras, edredones, cortinas, etc.". Así se presenta nuestra protagonista de hoy.
Y añade: "Recuerdo que de pequeñas, yo y mis dos hermanas al salir de clase, por las tardes acabábamos en la trastienda haciendo los deberes en los escritorios que nos construyó mi padre en la trastienda, y después trasteábamos entre los muestrarios de papeles, alfombras, cojines, telas de cortinas...".
"Creo que desde los 15 años tenía claro que cuando me independizara en mi casa tendría el papel pintado de rayas beige y blanco, y mi madre me decía 'bueno, para cuando tú seas mayor seguro que hay otras modas' ... Y la verdad es que, sí ha habido otra moda y otra variedad, pero he cumplido mi deseo de empapelar mi salón con papel de rayas beige y blanco", confiesa Esther.
Nuestra lectora tiene la cocina blanca con encimera beige. Y cuenta con un pequeño office para poder disfrutar de un buen desayuno en la misma cocina.
"Además, he tenido la gran suerte de que mi padre es muy muy manitas y me ha ayudado muchísimo en la reforma de mi piso. El piso era nuevo, pero juntos –con sus manos y mis ideas– lo hemos hecho a mi gusto y medida. Como mis padres siempre me dicen: "En esta vida hay que saber hacer casi de todo, desde hacer un contrato, que esta muy bien, a pintar una pared o colgar un cuadro"", reconoce nuestra lectora.
"En cuanto a las ideas para decorar mi casa, las he sacado de mi pasión por El Mueble, y por la decoración en general. Llevo muchos años viendo vuestra revista y creo que eso se plasma en la calidez de mi casa, en los tonos pasteles, en el gusto por los cojines, mantas y por la decoración que siempre da un toque personal a cada estancia. También me encanta montar la mesa con mantelería, vajillas y adornos, creo que los tengo todos, y siempre hay alguna cosa nueva que da un toque nuevo a cada celebración familiar", detalla la protagonista de este artículo.
El dormitorio principal de Esther es una habitación alargada y estrecha, pero le ha sabido sacar partido. Además de la cama, tiene un armario y un pequeño rincón de lectura y con espejo, para ver los looks.
El segundo dormitorio es similar al principal, pero en este caso predominan los tonos tierra, grises y rosados.
Y tiene una tercera habitación en la que podemos ver el diván HEMNES de IKEA junto a un armario.