"Somos Vanessa y Gerardo y somos lectores ávidos y asiduos de El Mueble. Nos encanta la revista, sus reportajes, sus hermosas casas, lugares llenos de encanto y que constituyen el hogar que todos ansiamos para estar a gusto y en paz". Nuestra lectora de hoy, Vanessa Louzao, y su marido se construyeron esta casa de campo en las montañas de Trevinca, concretamente en el municipio de A Veiga, provincia de Ourense.
"La casa está construida a 1.200 metros de altitud en una privilegiada atalaya sita en la parroquia de Santa María de Valdin, municipio de A Veiga, desde la que, sin salir de sus paredes, se puede disfrutar de unas majestuosas vistas de la montaña más alta de Galicia, Peña Trevinca, que con sus 2.127 metros es el punto más alto de la Comunidad Gallega y también de la provincia de Zamora, cumbre incluida en el Parque Natural del Lago de Sanabria", detalla nuestra lectora.
"Desde el ventanal abierto en el salón de la casa se observa como si de un cuadro se tratara un impresionante paisaje de montaña, donde la naturaleza es la única protagonista y nosotros unos meros observadores", relata Vanessa.
"Nos haría mucha ilusión que nuestra hermosa casa de campo fuese incluida en vuestra revista. Fue diseñada con pasión y mucho cariño y el resultado final les aseguro que ha sido mejor de lo previsto. Cuando cae la noche, todas sus estancias se llenan de encanto y nos transmiten una agradable sensación de paz y bienestar", añade.
"Nos gustaría compartir nuestro hogar con los lectores de la revista para que se planteen la posibilidad de vivir rodeados de naturaleza y paz con todo el confort y comodidad de un piso en el centro de Madrid, pero con el privilegio de ver como todos los días la naturaleza nos regala un precioso AMANECER", confiesa Vanessa.
La cocina también tiene una ventana con vistas a la naturaleza. Todo un lujo.
En los tres dormitorios de la casa destacan los cabeceros, muy vistosos. En esta primera, destaca por el color elegido, el azul oscuro, y de estilo clásico y capitoné.
En esta segunda habitación doble, el cabecero es de madera, hecho con troncos.
En el tercer dormitorio, hay un cabecero XL en gris y capitoné. En todas las habitaciones, la madera tiene mucha presencia, con la que se consigue ese ambiente acogedor de casa en la montaña.
"El potencial decorativo de la casa es enorme, aunque la decoración de la casa no está totalmente terminada. Estamos pendientes de instalar los imprescindibles visillos, alguna pared con papel decorativo, algunos cuadros, rematar la cocina, focos en las estancias, etc. En fin, unos detalles que confiamos a pesar de la pandemia estén rematados antes de final de año y que sin duda potenciarán el encanto de las estancias", concluye Vanessa.
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