Las estanterías de IKEA ofrecen todo un mundo de posibilidades. Es el caso de IVAR, parte de un sistema de almacenaje con más de 50 años de antigüedad. Realizada con madera maciza sin tratar, la estantería está disponible en múltiples tamaños que encajan a la perfección en salones, dormitorios, cocinas, recibidores y hasta garajes. Sus baldas se pueden mover para adaptarse a las necesidades de cada persona, pero hoy queremos ir más allá para enseñarte cómo hackearla y transformarla en el mueble de tus sueños. Por cierto, el modelo de la imagen mide 89x50x179 cm y cuesta 82 €.