Encontrar el lugar idóneo dónde formar y hacer crecer una familia, no es nada fácil. Una joven pareja con su bebé recién nacido, era consciente de que sus necesidades habían cambiado y ahora necesitaban una casa que se adaptara a sus nuevas necesidades. Así, se pusieron en contacto con el estudio de interiorismo de Borja Vildosola para reformar de forma integral su vivienda, ubicada en un edificio histórico del centro de Bilbao, con el objetivo de mejorar la distribución de los espacios y funcionalidad. ¿Cómo consiguieron esto? Jugando con las formas curvas para integrar la estructura original de la vivienda y permitir ensanchar las zonas de paso sin sacrificar la amplitud de los espacios. ¡Vamos a ver el antes y después del gran cambio!